La justicia avala la clausura ordenada por el Concello de Culleredo a un pub de Fonteculler por vulnerar la ordenanza de ruidos

La actuación del Concello de Culleredo imponiendo una sanción de clausura a un pub de Fonteculler ha recibido ahora el aval de la justicia. El juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 1 de A Coruña dictó sentencia desestimando el recurso interpuesto por el propietario del negocio contra la resolución de Alcaldía del 26 de julio del 2022, en la que se ordenó la sanción por la comisión de una falta grave tipificada en la ordenanza municipal de protección contra ruidos y vibraciones.

El alcalde, José Ramón Rioboo, resolvió en su momento dicha medida dentro del procedimiento incoado ante los posibles incumplimientos. En la instrucción se declaró probado que el pub Birras, situado en la urbanización La Ría, no tenía permanentemente conectado el sistema limitador para el autocontrol del volumen de los equipos de sonido. Esto suponía la mencionada falta grave en la ordenanza, que desembocó en la clausura total de las instalaciones del negocio por un plazo de 18 meses.

El juzgado descartó los argumentos del recurrente, que en parte se basaban en una supuesta inexistencia de la obligación de establecer sistemas de limitación acústica. La sentencia señala que «debe rechazarse el contenido de las alegaciones relativas a la falta de tipicidad de los hechos. El establecimiento disponía de una licencia de apertura en la que estaba previsto el sistema limitador, que en el momento de la inspección no funcionaba y había sido manipulado».

En cuanto al argumento de falta de proporcionalidad de la sanción impuesta por el Concello, la sentencia indica que «no puede, en este caso, a la vista de lo expuesto, apreciarse la falta de proporcionalidad de la sanción impuesta que justifique la anulación de la misma, dado que se valora en la resolución recurrida el grado de intencionalidad y la existencia de numerosas quejas vecinales». La sentencia es firme, precisan fuentes municipales.

Nuevas actuaciones en O Burgo

El regidor de Culleredo señaló que la sentencia confirma que la actuación municipal fue «impecable», con una instrucción del expediente «escrupulosa» para asegurar el cumplimiento de la normativa al respecto, a efectos de salvaguardar los derechos de todas las partes afectadas en esta situación. Rioboo avanzó que, desde la Administración local, se continúa con la vigilancia estricta a los locales de ocio nocturno para garantizar que cumplen con la ley y aseguran la perfecta convivencia entre estos y los vecinos. Con este refrendo de la justicia, el Concello procederá de igual modo, con apertura de expediente e instrucción, con un establecimiento de O Burgo, por los ruidos que están generando molestias a los residentes. El Concello advierte que continuará siendo estricto con las actividades que incumplan y rompan la perfecta convivencia con la ciudadanía.