La Voz de Galicia

Fomento considera «inadmisible» el plan de la Marea para Alfonso Molina

Cambre

X. Gago, E. Eiroa, E. Mouzo A Coruña / La voz
El atasco causado por uno de los últimos accidentes en la avenida de Alfonso Molina.

Sus técnicos concluyen que «agravará» los atascos y «rebajará la seguridad vial»

06 Nov 2015. Actualizado a las 05:00 h.

El «plan de humanización» propuesto por el gobierno local de la Marea para la avenida de Alfonso Molina supondrá «en el corto-medio plazo» que se «agrave» la falta de capacidad de la vía, lo que supondrá la «formación de largas y densas colas», «circulación intermitente con parones y arrancadas sucesivas» y «circulación forzada». Los técnicos de Fomento también concluyen que el proyecto «generaría una situación de alta peligrosidad, rebajando la seguridad vial de manera considerable, empeorando así la situación actual». El plan del gobierno local tampoco aporta «ninguna mejora» a la accesibilidad en el territorio y «no introduce mejoras en los enlaces, al contrario perjudica las salidas e incorporaciones (...) perjudicando la comunicación entre la ciudad y su área metropolitana».

Las frases proceden del informe elaborado por la Demarcación de Carreteras del Estado en Galicia sobre la propuesta de la Marea para reformar la vía, presentada como alternativa al plan de Fomento para ampliarla a cuatro carriles y mejorar sus enlaces.

El análisis técnico explica que en la actualidad Alfonso Molina es una vía con nivel de servicio «E», el segundo peor en la escala que utilizan los técnicos, que supone «velocidades reducidas y uniformes», «imposibilidad de adelantar» y «formación de largas colas». Pero según sus conclusiones, con la propuesta de la Marea, la vía pasaría a la categoría «F», la peor existente, con las consecuencias antes citadas.

El informe llega a esa conclusión tras analizar el plan del gobierno, que prevé una reducción de la calzada, con un recorte del ancho de los carriles de 3,5 a 3,3 metros y de los arcenes, que se quedarían con una anchura total de 0,2 metros (20 centímetros).

Además, la Marea prevé introducir una mediana de cuatro metros de anchura con arbolado. El informe considera que ocasionarán «problemas de seguridad vial» por la caída de hojas y elementos vegetales, que afectarán a la adherencia de los neumáticos; el efecto de parpadeo cuando el sol esté bajo y afecciones al tráfico por las tareas de mantenimiento del arbolado.

Es más, el informe destaca que la propuesta del Ayuntamiento no prevé «sistemas de contención de vehículos en las márgenes de la vía», de forma que los vehículos fuera de control podrían «impactar contra un árbol de gran porte» o incluso «invadir las aceras peatonales», que en la propuesta de la Marea están situadas al lado de la calzada.

La falta de barreras «no observa la norma técnica OC 35/2014». Tampoco lo hacen los carriles de incorporación, que presentan «distancias muy cortas» y vulneran el reglamento 3.1-IC Trazado, causando «situaciones de peligrosidad no permitidas».

El gobierno defendió su plan asegurando que sería más accesible a peatones y ciclistas y menos agresivo con el medio ambiente, pero los técnicos de Carreteras rechazan ambas afirmaciones. Concluyen que el proyecto municipal «no es más generoso» que el de Fomento, que incluye sendas peatonales-ciclistas y aceras.

Además, advierten que la contaminación acústica y atmosférica «es mayor en las vías en situación de colapso», las de tipo «F», al obligar a los conductores a circular en marchas cortas.

Es más, señalan que «no parece lo más adecuado» acercar a los peatones a la fuente de polución, el tráfico, con los «bulevares adosados» a la calzada que planteó el gobierno local; mientras que el proyecto del ministerio sí separa esos tráficos y abre la posibilidad de que los bulevares se construyan dejando en medio las zonas verdes y con cargo al presupuesto municipal.

Por las carencias citadas, los técnicos consideran «inadmisible» el proyecto en relación con el presentado por Fomento, que en su opinión lograría mejorar las condiciones de uso de la vía.

El ministerio descarta que la tercera ronda alivie más tráfico

Fomento reconoce que la tercera ronda ha supuesto un alivio de unos 30.000 vehículos al día en Alfonso Molina. Esa reducción es uno de los argumentos que emplea el gobierno local para pedir que no se amplíe la avenida ya que, razonan, lejos de estar colapsada, cada vez soporta menor número de automóviles.

El ministerio sí entiende, según sus datos, que pese a todo la vía se ha quedado pequeña y en su catálogo figura como de «capacidad insuficiente», pero es que además, los 120.000 vehículos que pasan cada día sobre su asfalto -según el consistorio son 102.000- no seguirán bajando por la apertura de la tercera ronda: «No se espera que la transferencia de tráfico entre ambas sea mucho mayor a la actual debido a que ambas infraestructuras sirven a tráfico de distinta naturaleza».

Así, aunque la nueva autovía sirve para atender tráficos de largo recorrido y de usuarios de la A-6 y el aeropuerto, no da salida a quienes viven en Oleiros, Culleredo, Cambre, Bergondo y Sada. «Por todo ello se prevé que la carretera mantenga el tráfico actual y este se incremente anualmente en el 1,12 % hasta el 2016 y a partir de esta fecha en el 1,44 %», indican desde el Ministerio de Fomento.

Accidente

Por otra parte, una pequeña colisión entre tres coches, en Perillo volvió a dejar en evidencia el embudo que se forma en la N-VI a su llegada al puente de A Pasaxe, ya que este accidente, sin daños personales, causó retenciones desde las 8.15 horas hasta pasadas las nueve de la mañana. Pero los problemas de tráfico no solo se notaron en la N-VI en sentido entrada a la ciudad, sino que el efecto dominó sumó colas en el puente de A Pasaxe, en la carretera de las playas, en la salida desde Fonteculler y, por supuesto, en Alfonso Molina, donde una vez más volvieron a repetirse los atascos.


Comentar