¿Cuál es ahora la zona de moda en A Coruña?

 Los lectores de La Voz sentenciaron que el Obelisco sigue siendo el centro de A Coruña. Se deba esto o no a una cuestión histórica o sentimental, lo cierto es que es abrumadora la cantidad de herculinos que siguen creyendo que el corazón de la ciudad está en los Cantones. Esto, no obstante, es una cosa, y otra es qué barrio o zona tiene ahora mejor fama, dónde se está cociendo —a veces literalmente— todo. 

El fenómeno de la gentrificación, del que no se libra A Coruña, sumado a una oferta hostelera que no deja de crecer y al efecto Inditex haciendo que los negocios más cosmopolitas tengan sentido, van poniendo el foco en unos barrios u otros. En la actualidad, son varias las zonas que podrían alzarse como lugar de moda.

Plaza de la Fábrica de Tabacos

La zona de Cuatro Caminos es poliédrica. Mientras en algunos puntos la delincuencia se agudiza, otros despuntan como enclave perfecto para pasar el día o por qué no, plantearse una mudanza. La plaza de la Fábrica de Tabacos lleva años siendo un referente de esas familias que quieren pasar una tarde tranquila en un espacio seguro para los niños. La cuestión es que desde que la promotora Vía Célere levantó los tres últimos edificios de esta zona, el lugar cogió fuelle y diferentes negocios vinculados a la restauración se asentaron pensando en un futuro prometedor.

Importantes compañías como la constructora Desarrolla también han visto un filón en esta plaza, eligiendo este lugar para sus oficinas.

La Taberna da Tabacalera abrió hace un año y medio y marcó un punto de inflexión en la zona, donde locales como La Granera y Coconut Grove ya tenían una clientela en cierto modo asegurada. Este restaurante de picoteo muy cuidado pero informal dio la bienvenida a otros espacios de hostelería que ya han llegado o llegarán en breves a esta plaza. De las empanadas, panes y tapas variadas de Pantín ya disfrutan desde hace unas semanas los que se acerquen por esta zona de Cuatro Caminos que, en breves, recibirá también la llegada de La Piadina.

Ciudad Vieja

No son pocas las veces que los vecinos de la Ciudad Vieja han lamentado el abandono que sufre su barrio, un icono de A Coruña por su peso histórico pero en ningún caso, al menos hasta hace poco, por el dinamismo de la zona. Con ciertos problemas de accesibilidad aún latentes, en los últimos meses el casco histórico de la ciudad se ha convertido en un reclamo indiscutible del ocio diurno y de primera hora de la noche. La oferta hostelera se multiplica con opciones donde disfrutar de un aperitivo (Caldito, Troppo), una copa (Azka) o una buena cena (Le Cucú, A Espiga, 55 Pasos), y es uno de los puntos donde el alquiler más se ha disparado. Ocurre igual con las viviendas de alquiler turístico, pues es en la Ciudad Vieja donde se encuentran las más codiciadas de la urbe.

Orzán

Algunos dicen de esta zona que es en Soho neoyorquino de A Coruña. O, menos ambiciosos, el Chueca de la ciudad. Más allá del Orzán que conocieron los millennials en su juventud, y desde luego muy lejos del barrio que conoció la generación boomer, se trata de un lugar que acoge los negocios más bohemios y sugerentes de la ciudad (PatriceArt, Flaco Studio o Ese Sitio) y, por supuesto, un sinfín de restaurantes que no faltan en la lista de los más foodies; destacan, en este apartado, Monkee Ramen, El de Alberto y Millo.

Las plazas de la Cormelana y de la Urbana han contribuido notablemente en la transformación de esta zona, convirtiéndose en foco del ocio de los veinteañeros y de los recién llegados a la ciudad. 

Plaza de Vigo y Pardo Bazán

Feudo tradicional de coruñeses de bien que ya peinan canas, la zona se ha ido democratizando gracias a la llegada de locales de hostelería que han supuesto una bocanada de aire fresco. Pero no solo esto, pues tradicionales del barrio como Casa Ponte se han convertido en locales de moda para los románticos que buscan buena comida en una tasca añeja. 

De las aperturas que en los últimos años le han dado un giro al barrio se encuentran el Roots, La Conquista, Terra Mia o Vermutería Chitin. La peatonalización de un tramo de Emilia Pardo Bazán ha fomentado que esta zona se haya convertido en punto de reunión de grupos de amigos, aunque esta «humanización» no genere simpatías entre todos los vecinos.

Plaza del Humor

La nueva vida del mercado de San Agustín y su entorno han vuelto a poner este barrio en escena. Clásicos como A Cunquiña captan ahora una clientela cada vez más joven, y la llegada de locales como  la tienda-taller D-Raíz o Varaston ofrecen una oferta de productos sostenible que atrae a un perfil de público interesante. 

La tortilla de Pontejos, una de las mejores de la ciudad, tampoco pasa inadvertida por los paseantes de esta zona, y su terraza los días de sol suele estar a reventar. A la oferta gastronómica interesante de la zona se suma Yema, un local que tiene en el huevo el gran protagonista y que es el lugar ideal para hacer una parada un sábado al mediodía.