La Barrié acogerá la colección asiática de Rockefeller III, inédita en Europa
Cultura
La muestra, centrada en la escultura budista e hindú, incluye 67 piezas únicas
18 Jul 2022. Actualizado a las 10:15 h.
La Fundación Barrié programa para el 20 de octubre en su sede de A Coruña la exposición Buda y Shiva, Loto y Dragón: Obras maestras de la colección de los Sres. John D. Rockefeller III en Asia Society. Inédito en Europa, el proyecto llega en primicia a Galicia después de una exitosa gira por Estados Unidos organizada conjuntamente por la American Federation of Arts y el Asia Society Museum.
La muestra se podrá visitar hasta el 22 de enero del 2023. Las piezas son una selección de la que fue la colección particular del magnate norteamericano John D. Rockefeller III, cuya pasión por las culturas orientales es ampliamente reconocida. En sus continuos viajes por Asia, el filántropo reunió una nutridísima muestra del arte local en sus diferentes culturas y escuelas. Su interés por lo cotidiano y por lo costumbrista queda plasmado, décadas después de su trágica muerte, en esta antología de obras de arte y de artesanía, un extraordinario conjunto de esculturas y objetos suntuarios elaborados en piedra, metal y cerámica.
Varios años llevaba La Fundación Barrié trabajando para traer este notable ejemplo de inmersión cultural y escultura antigua. Los objetos proceden de varias disciplinas y países representativos del continente asiático, desde China a Japón pasando por Camboya, la India, Nepal, Sri Lanka, Tailandia, el Tíbet y Vietnam. Antiguas joyas de alfarería, imágenes de deidades hindúes y piezas de culto budista forman el grueso de esta selecta reunión de fragmentos de realidades remotas.
El hogar habitual de la exposición es la sede del Asia Society Museum en Nueva York. John D. Rockefeller III se implicó especialmente con el desarrollo económico del deprimido Japón posterior a la Segunda Guerra Mundial. Íntimamente relacionado con Asia, su arte y sus misterios, su labor de recolección de obras de culturas milenarias es ahora recompensada con las miles de personas que han podido disfrutar por todo el mundo de esculturas que están en perfecto estado de conservación. Una cápsula del tiempo para viajar a realidades diferentes que estrecha los lejanos lazos entre lo oriental y lo occidental.
Así lo asegura Michelle Yun Mapplethorpe, directora del Asia Society Museum, quien apunta que esta exposición llega en el momento propicio para impulsar el hermanamiento entre culturas, y ayudar a corregir posibles errores, ya que «la discriminación a los asiáticos y a los estadounidenses de raíz asiática está aumentando». El cometido de esta exposición, por lo tanto, va más allá del plano meramente lúdico inherente a las expresiones artísticas, y se pone como meta el acercamiento entre diferentes a través de lo folklórico y lo bello.
Un trabajo de varias vidas
El cuerpo total de la muestra se compone de 67 piezas únicas que representan distintos períodos históricos de Asia. Las más antiguas datan del siglo VI a.C., y las más modernas, del siglo XIX. Rockefeller y su esposa, Blanchette Hooker, se hicieron con estos objetos entre las décadas de 1940 y 1970. Más de treinta años de esmerado interés por lo que, desde el prisma del occidentalismo, resulta tan exótico y ajeno. Desde objetos de uso cotidiano hasta vasijas del ámbito imperial, piezas ceremoniales budistas hasta esculturas de culto privado hinduista. Estas obras de arte proceden de un conjunto de contextos culturales y reflejan la diversidad de la región y sus amplios hitos artísticos.
La exposición se plantea casi como un parlamento entre concepciones del mundo paralelas pero no antagónicas. Un manifiesto a favor del multiculturalismo y el acercamiento entre distintos a través de la compresión y la asimilación de las artes plásticas. «Las obras maestras de arte asiático en esta exposición afirman el poder que las artes visuales tienen para tender puentes entre sociedades y tiempos. Tenemos el honor de colaborar con nuestros compañeros del Asia Society para hacer llegar esta exposición a diferentes públicos de los EE.UU. y del resto del mundo, donde hermosas esculturas, cerámicas y trabajos en metal ofrecerán nuevas perspectivas sobre las extraordinarias y diversas prácticas artísticas de la historia asiática, y fortalecerán los vínculos del entendimiento cultural en nuestro propio tiempo», apunta la directora ejecutiva de la American Federation of Arts, Pauline Willis. Se propone un vistazo somero, pero colorido y jugoso, no solo a los retratos y costumbres de remotos territorios, sino también a la actividad filantrópica de una de las familias más influyentes, ricas y poderosas de la historia de EE.UU.
Además de la exposición, se organizan actividades complementarias como un ciclo de conferencias con expertos en la materia y talleres didácticos para centros de enseñanza, colectivos con diversidad funcional y familias.
El 20 de octubre, Asia llega a Europa a través de Galicia gracias a estos 67 bocados exclusivos que trasladan y traducen culturas tan distintas entre sí como lo son, a su vez, de la occidental. Vistazos a un gran continente que, como todos los continentes, es una realidad de realidades llena de misterios, secretos, susurros, lirismo, sentimiento, religión y arte. La cima de tantas vidas dedicadas al mecenazgo y la conexión de los de aquí con los de allí, y de los de allí con los de aquí.