La Voz de Galicia

Taylor Swift desafía los límites y hace historia en los Grammy

Cultura

Javier Becerra Redacción / La Voz

Gala de los Grammy

La cantante americana gana por cuarta vez el gramófono al mejor disco del año, algo que nadie había logrado nunca

05 Feb 2024. Actualizado a las 17:42 h.

Tiene 34 años, es la artista más importante del pop contemporáneo y la pasada madrugada sumó otro récord a una carrera en permanente ebullición. Taylor Swift logró por cuarta vez el premio más deseado a los Grammy, el del álbum del año. «Estoy totalmente alucinada», dijo la cantante en el escenario rodeada por todo su equipo, tras recibir el gramófono de manos de Céline Dion.  Acaba de hacer historia. Colocaba su nombre en un lugar que, por ahora, nadie había alcanzado. Y superaba un nuevo listón en una trayectoria que no parece tener límites. Si en el pasado Fearless (2010), 1989 (2016) y Folklore (2020) obtuvieron ese reconocimiento, igualando a Frank Sinatra, Paul Simon y Stevie Wonder, ahora Midnights suma y sigue ya en solitario.

La emocionante reaparición de Céline Dion en los Grammy

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Este trabajo brilló de manera especial como conjunto de canciones más allá del single Anti-Hero. De hecho, antes ya había logrado el galardón a mejor álbum de pop local. Al recibirlo, aprovechó para proyectarse en el futuro. Si durante el día su página web se encontraba fuera de servicio, una vez que la artista lanzó el mensaje deseado desde el atril, esta se activó. El próximo 19 de abril habrá un nuevo disco de Taylor Swift, The Tortured Poets Department. Se trata de un movimiento insólito, ya que el lanzamiento tendrá lugar en plena gira The Eras Tour. Pero con una figura de esta dimensión todo es posible: desde regrabar toda su discografía para tener el control de las grabaciones a lanzar álbumes completos por sorpresa de un día para otro o, ahora, quebrar totalmente la dinámica de disco-tour-disco-tour.

La pirueta de Swift acaparó todo el protagonismo en una edición de los Grammy que siguió la tendencia plural de los últimos años. El premio a la mejor canción correspondió a la bellísima What Was I Made For que Billie Eilish compuso para la banda sonora de la película Barbie. Y el de mejor grabación acabó en las manos del Flowers de Miley Cirus, que ya antes recogiera el de mejor canción de pop solista. SZA, quien partía con la mayor cantidad de nominaciones, venció en la categoría de mejor tema de r&b; Victoria Monét se convirtió en la artista revelación; Boygenius logró el premio en la categoría de rock (también en canción rock y grupo alternativo); y Karol G venció en la categoría de género urbano. 

Billie EilishDAVID SWANSON | REUTERS

Son las líneas más destacadas de unos Grammy que mostraron un nivel tan alto que artistas destacadas como Olivia Rodrigo o Lana del Rey quedaron en un segundo plano, pese a sus notables trabajos. Más allá de los premios, en la gala la belleza y la emotividad se impuso a la espectacularidad de las actuaciones. Pronto llegaría el primer pinchazo. Sin pirotecnia alguna, el dueto entre Tracy Chapman y Luke Combs interpretando el Fast Car de la primera, conmovió por lo inesperado masajeando el recuerdo de una artista fantástica. Después, Billie Eilish caminó por la  frágil cuerda floja de su What Was I Made For tocando la fibra sensible de la audiencia.

Joni Mitchell escribió el gran momento. Justo después de sucederse varios homenajes a artistas fallecidos el pasado año (Stevie Wonder cantando a Tony Bennett, Annie Lennox a Sinead O'Connor y Fantasía a Tina Turner), llegó el momento de honrar una gigante en vida colocándola en el foco. Allí la artista, sentada y bastón en mano, interpretó junto a Brandi Carlile su eterno Both Sides Now . Una delicia. 

 

Joni Mitchell y Brandi Carlile durante su emotiva actuaciónMIKE BLAKE | REUTERS

Antes de todo ello, Dua Lipa inauguró la gala a lo grande, presentando su nuevo single, Training Season, y fundiéndolo con la exhalación electro-pop de Houdini. Olivia Rodrigo recreó su dramática Vampire con la cara ensangrentada, tal y como canta al chupasangres que le destrozó el corazón en la canción. Y U2 se colaron en la gala desde The Sphere en Las Vegas con Atomic City y su espectacular concepto de directo. Quedaron en la corrección los pases de SZA y Miley Cirus, mientras que Travis Scott optó en la oscuridad y, entre llamas, quiso dejar su huella como otrora hizo Kendrick Lamar, aunque sin llegar a ese nivel. Por último, Billy Joel se subió al escenario para interpretar su primera canción compuesta en 30 años. 

Detención inesperada

Mientras la ceremonia transcurría con aparente normalidad, la policía detenía al rapero Killer Mike que momentos antes había ganado tres Grammy. Tal y como recoge Efe aludiendo a The Hollywood Reporter, el cantante fue arrestado por un cargo menor que no está relacionado con los Grammy. «Liberen a Mike», gritaron algunos presentes al verle pasar. El rapero y compositor estadounidense, de 48 años y nacido en Atlanta (Georgia), ganó su primer Grammy en 2003 a la mejor actuación de rap por 'The Whole World', su colaboración con OutKast. Al agradecer sus premios subrayó precisamente que el rap no tiene edad: «Me importa un bledo si tienes 78 y rapeas sobre cuántas mujeres tienes en la residencia. Asegúrate de mantener el hip-hop vivo». 

 Palmarés

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