Italia conquista el podio al que se aúpan tres españoles

Dani Pedrosa y Pablo Nieto estuvieron impresionantes en el octavo de litro y Fonsi Nieto consiguió la segunda posición en dos y medio, pero los problemas del equipo quedaron más al descubierto que nunca. Está claro que Fonsi y Elías tienen prohibido verter críticas sobre Aprilia y a estas alturas cualquiera puede tener claro que mientras corra un italiano para la marca jamás un piloto de otra nacionalidad conseguirá el título. Y así lo demuestran los 22 segundos y medio que Poggiali le sacó a Fonsi en Mugello y los casi 40 con que aventajó a Toni Elías. En MotoGP ocurrió lo previsto. Una lucha encarnizada entre los tres tenores italianos: Rossi, Capirossi y Biaggi, que concluyeron por este orden. Los tres tuvieron una soberbia actuación, destacando que Loris consiguió alcanzar los 328 kilómetros por hora en la recta de Mugello, la misma velocidad que anunció su Ducati en los ensayos de pretemporada en Montmeló. Aunque pareció estar al límite de rodar por los suelos en varias ocasiones, lo cierto es que Loris aguantó y plantó cara sumando el segundo podio del año para Ducati. Max Biaggi comenzó muy fuerte. Rossi le presentó su rueda pero la Honda amarilla se cerraba a la perfección, mientras Capirossi recuperaba en la recta el tiempo que perdía en las curvas. Finalmente, en cuanto Valentino tomó la primera posición Mugelló vibró pero la carrera quedó zanjada porque el campeón ya tomaba distancia. Sólo los pequeños escarceos entre Biaggi y la Ducati animaron la carrera sentenciada. Tras ellos rodaba el japonés de DŽAntin, Shinya Nakano, que mantuvo a raya a Sete Gibernau, aunque en las últimas vueltas el catalán perdió posiciones finalizando séptimo seguido por Carlos Checa. Sete se mostraba decepcionado al final de la carrera porque su Honda acusó falta de velocidad durante toda la prueba y Checa parece que sigue sin levantar cabeza. Sin descanso, el Mundial vuelve a ponerse en marcha y regresa a España para su cita con el circuito de Cataluña, el próximo domingo, donde sin duda los españoles volverán a aspirar a lo más alto.