Michael Owen ya es jugador del Real Madrid

Michael Owen aterrizó ayer en Madrid para pasar el reconocimiento médico y estampar su firma como nuevo jugador blanco a cambio de 12 millones de euros y del traspaso de Núñez. La cuestión está ahora en saber cómo aceptará José Antonio Camacho la llegada del inglés, ya que las prioridades del entrenador eran un lateral, un central y un medio centro defensivo y no un delantero, plaza que tiene más que cubierta. Con la llegada de Owen a la plantilla ya son cinco los galácticos de la era Florentino, que busca que cracks deportivos pero también mediáticos. Y la jugada parece que le ha salido bien al máximo dirigente blanco, ya que el Balón de Oro del año 2001 es junto a Rooney el jugador que más camisetas vende en Inglaterra después de David Beckham y, además, es uno de los más admirados en tierras asiáticas. Sin embargo, una vez solucionado el tema del márketing queda otro más delicado, ¿quién será el perjudicado con su llegada? Raúl, Morientes y Ronaldo deberán demostrar que no merecen ser suplentes, al igual que Figo y Zidane. Y es que Owen puede ser el recambio del portugués o el francés tanto en la banda derecha como en la izquierda, respectivamente. Desde principios de esta semana se conocía el interés del Real Madrid por fichar al delantero internacional de 24 años. En este caso, las negociaciones fueron más fáciles. Rafa Benítez, actual entrenador del Liverpool, no contaba con el delantero. Además, el jugador que estaba deseoso de poder marcharse al Madrid, quedaba libre la próxima temporada. La venta de Eto'o El precio de salida por el internacional era de 31 millones de euros, pero finalmente el club blanco abonará al equipo londinense 12 millones de euros, la cantidad que ha percibido gracias a la venta al Barcelona de Samuel Eto'o, de quien tenía el 50% de los derechos. En la operación también entra el canterano Núñez, que será el tercer español que milite en las filas del Liverpool. El centrocampista, de 25 años, jugará en los reds las tres próximas temporadas. El Real Madrid se reserva un derecho de tanteo sobre el jugador en un hipotético futuro.