Seis mil kilómetros rumbo al título
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Ferrari y Red Bull son los únicos equipos que superaron esta barrera en los test invernales
14 Mar 2011. Actualizado a las 15:24 h.
La pareja de baile del 2010 gasta pista. Ferrari y Red Bull han sido los equipos con más kilómetros en los test de pretemporada. Se trata de las únicas escuderías cuyos coches sumaron más de seis mil kilómetros en los ensayos que se realizaron en Valencia, Jerez y Barcelona. El pulso del pasado Mundial se extiende a los prolegómenos del próximo campeonato. Queda por ver si será bendecido por la primera carrera, el Gran Premio de Australia, el 27 de este mes. Porque el aperitivo de la fórmula 1 no siempre se corresponde con los platos principales.
Fernando Alonso completó 3.483 kilómetros. Solo fue superado por su compañero, Felipe Massa, que con 3.501 es el piloto que más rodó en los entrenamientos invernales. Alonso quería acumular vuelta para probar el comportamiento de los compuestos de los neumáticos Pirelli. Y lo consiguió. El F150º probó su fiabilidad y se mostró muy regular. Relegó al olvido el debut de Massa, cuyo Ferrari quedó envuelto en una humareda tras dar solo doce giros, y las averías sufridas en Montmeló.
En kilómetros gana Ferrari, con más de ochocientos sobre Red Bull. Pero si se contabilizan los mejores tiempos logrados en cada jornada, Sebastian Vettel (Red Bull) es el gran dominador, con cuatro primeras posiciones, a los que se añade un primer puesto de Mark Webber. Por eso en la escudería energética están extremadamente satisfechos con esta pretemporada.
Como sucedió en ciertos tramos del pasado campeonato, pueden enfrentarse la fiabilidad y la velocidad. Aunque nunca hay que descartar a los invitados sorpresa. Los pilotos de Mercedes comenzaron un tanto dubitativos en Cheste, donde sufrieron problemas mecánicos, pero Nico Rosberg y Michael Schumacher se despidieron por todo lo alto, con los mejores tiempos de los últimos test de Barcelona. Y Renault, con el coche más rompedor, también firmó buenos cronos a pesar de la baja de Robert Kubica.
Los pilotos ya saben lo que es lidiar con los neumáticos Pirelli, que multiplicarán las paradas, y los volantes, plagados de botones debido al KERS y al alerón trasero ajustable. Pero será el Mundial el que sume todos los factores para elegir al campeón.