Tiger quiere otra chaqueta

Nadie osaría quitarle el cartel de favorito a Tiger Woods antes de que hoy comience el Masters (Canal + Golf, 21.00). En los últimos meses el jugador californiano recuperó el juego y la tranquilidad. Así que parte como máximo aspirante a ganar el primer grande de la temporada y romper una racha de casi cinco años sin majors, desde que se hizo con el US Open de Torrey Pines en el 2008. Vuelve a ser el mejor pateador, algo clave en Augusta, donde los greenes resultan decisivos, y vuelve a conseguir los números asombrosos de sus mejores tiempos. Es cierto que tiene la tendencia de lanzar la bola de derecha a izquierda, cuando el recorrido de Augusta exige ir bastante recto y en varios hoyos se necesita lo contrario, mandarla de derecha a izquierda. Pero tiene tanta potencia que desde el tee no jugará siempre el driver, sino que buscará mas tiros a colocar. Creo que solo sacará el palo más largo de la bolsa dos o tres veces por vuelta, y que en muchos casos elegirá la madera tres para poner la bola en la calle con mayor seguridad. A partir de ahí, con los hierros medios y cortos no tiene problema y patea como nadie.

Woods, ganador de cuatro Masters, persigue su quinta chaqueta verde. Tiger compartirá partida en la primera jornada (16.45 en España) con el inglés Luke Donald y el estadounidense Scott Piercy.

La experiencia, un requisito

Aspirantes conocidos en un campo donde no se rinde a la primera oportunidad

Augusta es un campo complicado, en el que sirve de vital ayuda haberlo jugado varias veces. Por eso muchos jugadores debutantes tienen tantos problemas en su estreno, que puede resultar frustrante. El domingo, a la hora de la verdad, estarán en la pelea por los primeros puestos del Masters gente con experiencia, veteranos como Phil Mickelson, Jim Furyk y esta clase de jugadores. El putt y pegarle bien desde la salida resulta fundamental, conceptos que dominan también otros aspirantes como Steve Stricker.

Europeos

El triunfo en la Ryder Cup queda ya muy lejos

El triunfo en Medinah en la Ryder Cup queda ya muy lejos y no creo que aquella remontada tenga un efecto motivador para los europeos. El Masters es otra guerra, empezando porque se disputa por golpes, no por hoyos. El norirlandés Rory McIlroy llegará con algo más de confianza gracias a su segundo puesto de la semana pasada, en la que jugó bien en el Valero Texas Open. Augusta se le da bien, como ya vimos en anteriores ediciones. Entre los ingleses, Lee Westwood atraviesa un buen momento, al contrario que Luke Donald. E Ian Poulter es un luchador que se declaró jugador para ganar majors, aunque considero que si realiza una actuación sobresaliente lo lógico es que se mueva entre los diez primeros, pero no mucho más arriba.

Sudafricanos

Dos ganadores recientes y varias posibilidades más

Los golfistas sudafricanos ganaron dos de los cinco últimos títulos, Trevor Immelman en el 2008 y Charl Schwartzel en el 2011. Cuentan con un total de ocho representantes en Augusta. Jugadores como el propio Schwartzel y Louis Oosthuizen pueden contar para el triunfo, más que Ernie Els, en mi opinión.