Bronce de oro para Carreño

Ganar en un mismo torneo a los jugadores 1 y 2 del ránking mundial ya es un motivo enorme de satisfacción. Conseguir una medalla para tu país en los Juegos Olímpicos es un sueño para cualquier deportista. Ambos logros los consiguió simultanear en Tokio un chico asturiano con un excelente palmarés en su carrera, pero al que nadie daba como favorito para conseguir medalla.

Ausente Rafa Nadal, las posibilidades de éxito para el tenis español se centraban más en la actuación de nuestras jugadoras que en los chicos. Sin embargo, Muguruza no dio la talla, y Badosa tuvo que abandonar víctima de las extremas condiciones atmosféricas de la capital nipona. Eliminado Davidovich por Djokovic, todo quedaba reducido a lo que pudiese hacer Pablo Carreño (Gijón, 1991) que a pesar de realizar un buen torneo tenía un durísimo escollo en cuartos: Medvedev. Ahí se agigantó la figura del asturiano que realizando un excepcional partido superó al ogro ruso al que a nadie le gusta tener como rival.

En semifinales, Pablo no pudo exhibir el mismo nivel ante un gran Khachanov, que le superó con claridad, pero al final del partido, la reacción del español en vez de desanimarse, fue contundentemente optimista: «La derrota de hoy, no puede costarme otra mañana».

El partido por el bronce frente a Djokovic (6-4, 6-7 y 6-3) tenía un gran componente anímico. El serbio había perdido frente a Zverev la posibilidad de jugar por lo que había ido a buscar a Tokio: la medalla de oro. La derrota le dejaba sin motivación personal, pero Nole estaba representando a Serbia, y su país no le perdonaría el no disputar al máximo el partido por el bronce.

El duelo comenzó con dominio del de Belgrado, al que Pablo difícilmente podía contener., Sin embargo, en el quinto juego, el español consiguió romper en blanco el saque de Nole, lo que sería decisivo para anotarse el primer set por 6/4.

En la segunda manga mandó la igualdad entre ambos jugadores lo que acabó en un tie break en el que Carreño tuvo una bola de partido, pero dos excelentes saques del serbio y un error del español dieron el triunfo a Djokovic, lo que suponía ir a un tercer set decisivo.

Djokovic, tocado

Un parcial en el que Djokovic más tocado físicamente que el español trató de acortar los puntos, frente a un adversario que se agarraba a la pista con enorme consistencia. El español se adelantó por 3-0 y 4-1 . Su saque funcionaba mucho mejor que ante Khachanov, mientras que Djokovic jugaba con un bajo porcentaje de primeros y cometía más errores de los habituales. Fueron momentos en los que el serbio sacó a relucir sus malas maneras y su carácter nada ejemplar cuando las cosas no le funcionan. Tiró la raqueta contra la grada y posteriormente la rompió aunque increíblemente solo fue sancionado por la segunda acción. Creo que ya va siendo hora de que se endurezca mucho más el reglamento sancionador sobre estas acciones que suponen un malísimo ejemplo para los jóvenes y en nada benefician al tenis.

Pero Pablo, enormemente concentrado, no cayó en las provocaciones de su rival, siguió manteniendo la sencillez frente a la arrogancia, la firmeza frente a la desesperación, la capacidad de aguante frente al desgaste y la educación deportiva frente a los malos modos y no cedió en su ventaja. Con 5-3, el número 1 del mundo levantó varias bolas de partido, pero Pablo mantuvo la calma, y con unos magistrales saques abiertos le cerró al serbio la posibilidad de una remontada. Medalla de bronce para España y el mayor éxito en la carrera de Pablo Carreño, un chaval asturiano de 30 años, que alcanzó en el 2017 el top-ten, que representó a España en la Copa Davis, que jugó dos semifinales del US Open en el 2017 y el 2020, que cuenta con 6 victorias en torneos ATP, la última recientemente en Hamburgo... Es decir, un palmarés excelente en cualquier país, pero empequeñecido por competir bajo la misma bandera que Rafa Nadal.

Tenis muy completo

Con un tenis muy completo y consistente, el asturiano llegó a la élite tras un extraordinario paso por los torneos inferiores, con un récord de 18 finales consecutivas en Futures de las que ganó 11. Una lesión de espalda detuvo, pero no impidió su progresión. Y tampoco cambió su carácter, correcto en la pista y sencillo fuera de ella. En una de las visitas que realizó a sus orígenes, el Grupo Covadonga de Gijón, uno de sus alumnos, un chaval de 12 años declaraba: «No solo me gustaría ser como él en cuanto a jugador, si no también como persona». Justo lo contrario de lo que simboliza su rival. Djokovic es un excepcional jugador que pasará a la historia del tenis como uno de los mejores, pero sus comportamientos en la pista le alejan de Nadal y Federer y, por mucho que gane, no conseguirá la admiración y la simpatía que despiertan el español y el suizo en cualquier parte del mundo.

El serbio fracasó en su apuesta por jugar en Tokio, y el tenis olímpico ha hecho justicia con Pablo Carreño en el reconocimiento a una gran trayectoria de un excelente jugador y un ejemplar deportista al que este triunfo incentivará cara al futuro, para su bien y el del tenis español.

Djokovic dice que jugó medicado y renuncia a luchar por el bronce en el dobles mixto

El número 1 del ránking ATP, Novak Djokovic, ha salido a pedir perdón tras su derrota frente a Carreño. El serbio ha explicado tras el partido que estaba mal físicamente al tener «varias lesiones, no una».

Novak se ha excusado y ha dicho jugó medicado estos partidos, con «muchos dolores» y ha anunciado su renuncia a competir por la medalla de bronce en el dobles mixto junto a su compañera Nina Stojanovic.

Se acaba así un decepcionante paso del serbio por Tokio 2020 en el que no ha conseguido ninguna medalla. De hecho, acudió a los Juegos para ganar dos oros y se marcha de vacío y lesionado antes del US Open, el último grande de la temporada en el que no sabe si podrá competir.

Ha sido derrotado tres veces en el torneo, las mismas que en todo lo que lleva de temporada en el circuito ATP.

Zverev y Khachanov juegan hoy por suceder a Andy Murray

Después de sorprender a Novak Djokovic, número uno del mundo, en la semifinal, Alexander Zverev, el primer alemán que llega a una final de tenis individual masculino en los Juegos desde que Tommy Haas ganó la plata Sídney 2000, espera dar un paso más y conseguir el oro. Para ello, tendrá que superar al ruso Karen Khachanov, que venció a Pablo Carreño en dos sets en su semifinal. El vencedor será el sucesor del británico Andy Murray, que ganó el oro en individuales en el 2012 y el 2016, pero que se retiró al inicio de la competición por una molestia en el cuádriceps.

En las otras finales del día, las checas Barbora Krejcikova y Katerina Siniakova se enfrentarán a las suizas Belinda Bencic y Viktorija Golubic en dobles femeninos, mientras que en la final de dobles mixtos se enfrentarán Elena Vesnina y Aslan Karatsev contra Anastasia Pavlyuchenkova y Andrey Rublev.

Todos los encuentros, desde las 08.00 horas en RTVE.