Argimiro Marnotes: «Vamos con el Valencia en la Copa»

Argimiro Marnotes Fernández (O Carballiño, 1966), es de esos presidentes que no necesitó presentarse cuando accedió al cargo de dirigente del Club Deportivo Arenteiro. Exalcalde en su villa natal con la bandera del PP e hijo de otro regidor municipal, Argimiro Marnotes Rodríguez, quien sostuvo el bastón entre 1977 y 1991. Su figura era conocida en las gradas de Espiñedo y hasta hizo algún escarceo con el balón en la cantera del equipo de sus amores. Parecía predestinado a ocupar la vacante.

—¿Le costó mucho bajar de la tribuna para entrar en las oficinas de la directiva?

—Este año lo llevo mejor, el cambio fue más grande en la pasada temporada y ahora parece que tenemos todo un poco mejor encaminado.

—¿Está siendo duro el tránsito entre una campaña tan exitosa en Tercera y el debut en un torneo como el de la Segunda RFEF?

—Tuvimos que pasar por un período de adaptación en la primera vuelta, algo que sucede en muchas facetas de la vida, porque tocaba saber cómo era la Liga. Ahora estamos recogiendo los frutos de ese trabajo y compitiendo a un mejor nivel.

—Y lo que está asegurado es el ambiente en Espiñedo y la convicción de que los aficionados están disfrutando.

—Puedo decir que fui a casi todos los partidos, no solo a los de Galicia y lo que se ve en nuestro campo lo he visto en muy pocos. Es uno de los aspectos que me anima, tanto a mí como al resto de las personas implicadas en el club, a seguir trabajando cada día, porque sabemos que lo hacemos para una afición que ha sido fiel al equipo en todo momento. Es lo más bonito del fútbol.

—Y en alguna de esas visitas también pudo divertirse usted, como cuando acudió disfrazado de pulpo a Santiago de Compostela.

—Quien me conoce sabe que disfruto tanto de las cosas que rodean al fútbol como del propio deporte en sí. Si es entroido, pues te disfrazas, y si lo vas hacer, pues de pulpo, que es muy representativo de O Carballiño. La verdad es que no fue algo premeditado, pero visto después, estuvo bien que sirviera para darle un poco más de impulso a uno de los productos estrella de nuestro municipio.

—¿Qué recuerda de otra noche histórica del curso como la visita del Valencia en la Copa del Rey, teniendo en cuenta que hablamos de uno de los finalistas?

—Lo primero que hice cuando derrotaron al Athletic Club fue enviar un mensaje a los contactos que tengo del club, para felicitarlos. Poder jugar contra ellos aquí fue un auténtico lujo para nosotros y, más allá de los sentimientos de cada aficionado, para nosotros es una forma de estar en la final. Vamos con el Valencia en la Copa, casi entraríamos en el palmarés, porque seríamos los únicos que obligamos al campeón a llegar a una prórroga.

—¿Fue también uno de los retos más importantes para su directiva?

—Desde luego, albergar un partido de una competición del más alto nivel nacional no es sencillo. Nuestra afición dio todo un ejemplo y disfrutó del partido, bien ordenada en las gradas. No sé cuándo volveremos a disfrutar de una noche así.

—¿Y en la Liga, ve al equipo con capacidad para asentarse durante unos años?

—Más allá de la propia competición, que es dura y te exige, creo que es posible. Hay pulmón y la sociedad responde. No hace falta un proyecto con grandes pretensiones, pero sí trabajarlo bien y que enganche a nuestros aficionados, como está sucediendo hasta ahora.

—A veces parece una estructura profesional, pero si rascamos un poco, no lo es tanto.

—Yo siempre digo que si quieres saber si un club es profesional, basta con llamar a su contacto. Si te responde el presidente o una persona muy próxima, es que todavía faltan muchos pasos y eso es lo que sucede aquí. En esta categoría, por ejemplo, tenemos algún rival al que llamas y te contesta un empleado de administración y te pueden pasar con márketing, contabilidad o con cualquier otro departamento. Al Arenteiro le toca seguir creciendo y este es un buen entorno para seguir mejorando nuestra estructura año a año.

—¿Los equipos femeninos son una de estas metas a corto plazo?

—Desde que llegamos al club hablamos de darle la oportunidad a las mujeres y niñas de nuestra comarca de practicar el fútbol. Así pueden apuntarse en el Club Deportivo Arenteiro, con la idea de crear plantillas exclusivamente femeninas, al margen de su edad. Y no será la única iniciativa, porque queremos seguir trabajando para engancharnos a la sociedad que nos rodea. Ese tiene que ser el objetivo del club, en cualquiera que sea la categoría en la que milite el primer equipo.

En corto

Marnotes Fernández se declara un hombre familiar y de gustos sencillos. El balompié ha sido una de esas pasiones desde siempre y, de hecho, en el verano ese complicado 2020, aparcó buena parte de sus responsabilidades políticas para asumir las de dirigir a un Arenteiro en el que nadie daba el paso al frente, tras el adiós de Francisco Fernández, Cachorro. Sobre sus gustos descubre varias curiosidades.

—¿Cuál es el último libro que ha terminado de leer?

—Tengo que reconocer que estoy leyendo muy poco. No tengo tiempo suficiente y es uno de mis objetivos para los próximos años.

—¿Es más de cine o de televisión?

—Siempre me gustó el cine, ir a las salas, pero también voy muy poco últimamente, al tener los fines de semana ocupados por el fútbol.

—¿Un partido en Espiñedo o un Madrid-Barça por la tele?

—Uno en directo en cualquier escenario y cualquier categoría. Lo que más me gusta del fútbol siempre ha sido el disputarlo a pie de campo.

—¿Qué jugador le marcó de pequeño?

—El que más me gustó fue, de no tan pequeño, Juan Carlos Valerón. De antes, me gustaba mucho el juego de Schuster.

—¿Una ciudad?

—París, he ido tres o cuatro veces y siempre disfruto de pasear por sus calles y descubrir nuevos sitios.

—¿Otro deporte?

—Lo estoy intentando, a ver si convenzo a alguien para probar con el pádel. Incluso me gustaba la bici, pero la fui dejando al faltarme tiempo.