Duplantis y Amusan, con récords mundiales, ponen el broche a Eugene 2022
Deportes
El joven Duplantis se impone con una marca de 6.21 metros en salto de pértiga, mientras que, Tobi Amusan hizo lo propio en los 100 metros vallas con una marca de 12.12
25 Jul 2022. Actualizado a las 18:46 h.
El sueco Armand Duplantis, conquistó su primer título mundial en pértiga con récord del mundo, y la nigeriana Tobi Amusan, triunfadora en los 100 metros vallas, y con mejor registro mundial en las semifinales, pusieron el broche de oro a los Mundiales de Eugene (Oregon).
Duplantis selló el nuevo récord mundial con un salto de 6.21 metros que mejoró su anterior mejor marca, de 6.20, y consiguió el título que le faltaba en una carrera que, pese a sus 22 años, ya es legendaria. El oro olímpico de Tokio se quedó solo contra el listón a partir de los 6 metros y logró su nuevo récord al segundo intento. El estadounidense Chris Nilsen y el filipino Ernest John Obiena compartieron marca de 5,94 y compartieron con el sueco la ceremonia de entrega de medallas, en tanto que el brasileño Thiago Braz, campeón olímpico en Río 2016, se quedó a las puertas de la presea con 5,87.
Duplantis, ya luce en su palmarés el título olímpico, el mundial en pista cubierta y los europeos tanto en sala como al aire libre.
La sorpresa nigeriana
La otra gran protagonista del domingo en Eugene fue la nigeriana Tobi Amusan, que conquistó el título mundial en los 100 metros vallas y estableció el nuevo récord mundial en las semifinales, con una marca de 12.12. Amusan, que no estaba entre las favoritas para alcanzar la corona mundialista, hasta había mejorado su propio récord en la final, pero su tiempo ganador (12.06) fue conseguido con viento ilegal de 2,5 metros por segundo.
La jamaicana Britany Anderson se alzó con la medalla de plata con 12.23, con 5 milésimas de ventaja sobre la puertorriqueña Jasmine Camacho-Quinn (12.23), mientras que la estadounidense Kendra Harrison vivió una jornada amarga: perdió su récord mundial en semifinales y fue descalificada en la final.
Las rondas precedentes se habían cobrado víctimas ilustres como la propia defensora del título, la estadounidense Nia Ali, que rodó por la pista en su serie, o su compatriota Alaysha Johnson, la segunda más rápida del año con 12.35.
Estados Unidos cerró sus primeros Mundiales con grandes satisfacciones gracias a sus dos relevos 4x400 metros, que permitieron a su atleta Allyson Felix redondear hasta las 20 su cosecha de medallas en la historia de los campeonatos. El equipo estadounidense acabó al mando por números de medallas, con trece oros, nueve platas y once bronces, por delante de Etiopía, Jamaica y Kenia, con 10 preseas en total.