Un espectador del Voltregá pega un puñetazo a un jugador del Vic en medio del encuentro de la OK Liga de hockey sobre patines

El pabellón Oliveras de la Riva de San Hipólito de Voltregá volvió a set escenario de un hecho antideportivo que, por el momento, no ha tenido consecuencias para la entidad.

El pasado sábado se disputaba el encuentro de la décima jornada de la OK Liga entre el equipo local y el Vic, cuando Oriol Vives, jugador visitante, fue víctima de una agresión. Lo curioso de este hecho es que el autor del puñetazo no fue un integrante del equipo rival, bien durante la disputa de una bola, bien en una acción aislada. Lo llamativo es que el agresor fue un espectador. El hecho se produjo cuando Oriol Vives iba lanzado en pleno contragolpe pegado a la banda. En ese instante alguien, desde la grada, pegada a la valla, le suelta el puño y lo derriba. El grupo de hinchas que estaban en la zona fueron alejados, pero el encuentro, tras pararse unos minutos, continuó.

No es la primera vez que Sant Hipólito es escenario de un acto extradeportivo. Sin ir más lejos, el Liceo vivió la pasada temporada un hecho que llevó a su entrenador a llevarse a sus jugadores de la pista, cuando Tombita recibió insultos racistas y xenófobos, según el club, primero por parte de un jugador, Aleix Molas y, posteriormente, desde la grada. Copa decidió retirar a sus hombres de la cancha durante ocho minutos en un gesto de protesta; posteriormente, regresaron y el partido concluyó.

Otro incidente tuvo lugar hace unas semanas cuando a un jugador del Noia le pincharon las cuatro ruedas del vehículo que tenía en el aparcamiento del polideportivo de Voltregá.