Triple homenaje a Laxeiro en Lalín

Laxeiro, ya en vida fue un lalinense universal, un genio de la pintura y el arte, pero también alguien cercano para sus vecinos. Su carácter extrovertido, sociable y su alma de gran fabulador lo convertían en el centro de atención allí donde iba. En este 2022 que la Real Academia Galega de Belas Artes dedicó a su memoria, el calendario ha estado ya lleno de actividades y de eventos en los que la mirada estuvo puesta en su vida y en su obra.

Parte de este abanico de iniciativas lo desarrollaron los jóvenes: los alumnos del instituto lalinense que lleva a gala su nombre y que quisieron homenajearlo, sobre todo, con lo que a él más le gustaba: con música y con arte. Cuando ya rebasamos el ecuador del año dedicado a este lalinense ilustre, ayer la sala Tuno Valdés del Auditorio fue escenario de un triple homenaje ofrecido por el Concello de Lalín.

Tres regalos a su memoria que dejarán para la posteridad un legado. Fueron, por encargo del gobierno lalinense: el documental Laxeiro, sempre Laxeiro realizado por el lalinense Emilio J. Fernández; el cuadro Xuntanza con Laxeiro, obra del pintor colombiano afincado en la localidad, Carlos Santos, y la pieza Fantasía musical de Laxeiro compuesta por José Luis Represas y que ayer tocó la Banda de Lalín.

Los actos, que fueron presentados por la concejala de Cultura, Begoña Blanco, arrancaron con la proyección del documental tras la intervención de su autor.

El presidente del Parlamento, Miguel Ángel Santalices, fue el encargado de descubrir el cuadro que representa a Laxeiro acompañado por los artistas participantes en la primera Bienal. En el acto intervino el director xeral de Cultura, Anxo Lorenzo, y el alcalde de Lalín, José Crespo. Begoña Blanco leyó un texto de Represas sobre la pieza y presentó a la Banda cuya interpretación cerró el homenaje. Crespo destacaba estos días esta celebración que contribuirá a conocer un poco más y a divulgar las diferentes etapas y la faceta humana de este pintor universal: los pasos y las influencias que fueron marcando su vida y su carrera artística. Con la pieza musical, el Concello de Lalín quería también plasmar en este otro lenguaje artístico a Laxeiro. Crespo pidió a su autor que tuviese ritmo de fiesta. Un triple homenaje para un lalinense que un día dejó de ser José Otero Abeledo para convertirse en Laxeiro y dejar huella en la historia y en el arte.

«Todo los vecinos tienen algo que contar de él»

El encargo del cuadro de Laxeiro nació del realizado por Carlos Santos que refleja a los músicos del Clarinet fest. Explica el pintor colombiano afincado en Lalín que el regidor, José Crespo, lo vio y de ahí nació la propuesta. Es como este otro, una obra de gran formato. Mide 3,70 por 1,70 metros y en él están pintadas las figuras de 32 artistas entre escultores y pintores. Son los participantes de la primera Bienal, pero apunta Carlos Santos, «se habla también del primer cartel de Laxeiro del Cocido de 1993». En su obra, explica, «hai muchas refeferencias a Lalín: está la iglesia, está Ramón María Aller, el parque que hay detrás de la estatua, la escultura de Loriga, el cruceiro que se encuentra a la entrada de Lalín que fue hecho por Payo, la casa de Álvaro Moure, los caballos...». Aparece también, añade, «un único músico que es Plácido que está tocando una muñeira a Laxeiro que la tocó el día de su funeral como despedida. Estaba previsto que la escuchara en vida pero cuando la tocaron , el no pudo asistir porque ya estaba enfermo».

Entre los pintores reflejados se encuentra Manolo Rial, autor de la escultura del cerdo y que, apunta Santos, «fue la foto que más me costó conseguir». Santos señala que «Laxeiro fue un pintor que dio mucho y que recibió mucho». Explica que «si hablas con todo Lalín, casi todos los que Lalín de cierta edad, tienen algo que ver con Laxeiro, tienen una experiencia con él, algo que contar, era un hombre que se relacionaba mucho con la gente».

La realización del cuadro, señala, «me demoró seis meses». Están Vidal Payo, Manolo Rial, Colmeiro, su hija Elena, Sucasas, Manolo Paz, Nicolás Aller, Manolo Moldes, Paco Lareo, Arias, O Vila, Álvaro Negro, Paco Pestana, Antón Patiño, Francisco Leiro, Fondevila, Pilar Taboada, Guillermo Aymerich, Armindo Salgueiro, Gloria Alonso, Lomarti, Antón Lamazares, Paio, Willy, Inacio Vilariño, Manuel García Buciños, Magalhais, José Couto, Eduardo Meijome, Luis Iglesias Luchi, o el propio Laxeiro

A ellos se suman el regidor, José Crespo, Plácido Rozas y Cecilia Doporto. Carlos Santos quiere «que la gente se pare, lo vaya viendo y cuando esté enfrente del cuadro quede atrapada descubriendo lo que hay en él». Considera que es «un retrato descriptivo de Lalín». Realizado en acrílico en blanco y negro la falta de color inyecta mayor dramatismo a la imagen. Es, apunta, «un retrato de aparato que quiere dimensionar la figura de Laxeiro».