Marta Varela: «Foi un partido duro pero gañamos a Copa na casa»

El Coreti Rugbi Lalín se proclamó campeón de liga tras derrotar al Kaleido Universidade de Vigo por 36-17. Entre tantas emociones, por el título y la pedida de mano, hacer balance del partido casi quedaba en un segundo plano. Marta Varela, la entrenadora abellona, reconocía que «foi un partido duro pero gañamos a Copa na casa». Reconocía que resultó vital la actitud en el campo, no zozobrar en algún momento puntual donde las viguesas estuvieron a tan solo un ensayo, porque ellas podían redoblar esfuerzos y tambalearse la confianza rojinegra.

Esa posibilidad se desvaneció tras quince minutos de buena defensa, sumando de nuevo ensayos que definitivamente decantaron la victoria para las lalinenses. Varela incidió en que resultó un choque disputado, con superioridad local pero enfrente «tivemos a un equipo duro e intenso». Así lo atestiguan los golpes y dolores tras el pitido final, esquinados por el subidón del título autonómico logrado por segunda temporada consecutiva, todo un éxito.

Como apuntaba la propia entrenadora al Coreti Lalín se le podía aplicar el dicho de que no es como se empieza sino como se acaba, ya que la liga arrancó con dudas. Casi toda la plantilla estuvo ayer disponible, 21 jugadoras, que festejaron por todo lo alto este gran logro. No faltaron las fotos de familia con la Copa o regar con cerveza a las prometidas.

Tras digerir este sábado de felicidad plena tocará pronto tomar decisiones sobre si disputar o no la fase de ascenso. Para Marta Varela será clave conocer los rivales, además de contar con financiación para el viaje, porque cree que no aportaría nada jugar para perder por cien puntos de diferencia dada la disparidad de las distintas ligas. En principio podría tocarles la Universidad de Zaragoza como representante de Aragón, pero eso se pensará en unos días. Ayer tocaba festejar y agradecer al público que abarrotó el Cortizo su apoyo constante, sus gritos de ánimo en los momentos más complicados. «Empuxaron a morte, non pararon de berrar forza abellonas».