«Estoy cursando un doctorado para resolver problemas médicos con IA»
Deza
Este lalinense, que trabaja en Londres, investiga cómo puede ayudar en cuestiones relacionadas con el tratamiento de tumores cerebrales
19 Jan 2025. Actualizado a las 05:00 h.
Alejandro Santórum Varela (Lalín, 1998) tiene 26 años y un impresionante currículo académico. Desde octubre del 2022, tras la realización de un máster en Inteligencia Artificial en Cambridge, trabaja en Londres para un fondo de inversión «resolviendo problemas con IA». En la Universidad Autónoma de Madrid cursó un doble grado en Ingeniería Informática y Matemáticas. Acabó la carrera en el 2021 acumulando doce matrículas de honor en diferentes asignaturas. Hoy realiza un doctorado en la Universidad Autónoma, que investiga el empleo de la IA en la resolución de problemas médicos.
—¿Cómo marcha el doctorado?
—Lo estoy haciendo en mi tiempo libre, fuera del horario laboral en remoto. Investigamos cómo la Inteligencia Artificial puede ayudar en problemas médicos y asistir en problemas de la medicina. Empezamos en febrero del 2024 y ahora estamos acabando un pequeño trabajo que vamos a intentar publicar en una revista médica-informática, una revista técnica que habla de la Inteligencia Artificial aplicada al sector de la medicina y a ver qué conseguimos ahí.
—¿La investigación es en la medicina en general o se centra en alguna especialidad?
—Ahora mismo estamos intentando con imágenes de cerebros con tumores obtener la imagen equivalente del cerebro sin el tumor. Es decir, saber cómo podría ser el cerebro antes de tener el tumor. Muchas veces los pacientes llegan a la consulta o al hospital con el tumor ya desarrollado y tener la imagen probable del cerebro sano le puede dar información valiosa al personal sanitario y utilizar herramientas pensadas para cerebros sanos, que no se pueden usar en cerebros con tumores.
—Supongo que las aplicaciones de la IA pueden ser infinitas.
—Tiene muchas pero tampoco se debe utilizar como una herramienta para resolverlo todo. Hay cuestiones del ser humano como la intuición y otras que no las puede suplir una máquina. El objetivo de la Inteligencia Artificial no es suplir el trabajo, en este caso de un médico, pero sí que le puede servir como herramienta para agilizar su trabajo o hacerle la vida más fácil y que se centre en otros temas que tiene que atender. Lo mismo en otros trabajos y profesiones.
—¿Ya quería ser ingeniero cuando era pequeño?
—No, no. Cuando era más pequeño quería estudiar Medicina pero hubo un momento en el que me di cuenta que eso no era lo mío y en algún momento me percaté de que me gustaba la informática, me gustaba programar, decirle a un robot qué hacer y ver que hacía lo que le había dicho. Eso fue cuando cursaba cuarto de la ESO y desde esas me encantó el mundo de la informática. Las ciencias me gustaban mucho en general: Matemáticas, Física. Y desde ese momento básicamente quería estudiar Informática.
—Tiene un currículo impresionante. Matrícula de honor en BAC, cuatro becas de excelencia, matrícula de honor en la tesis final de máster en Cambridge,... estudiar por lo que se ve, se le da bastante bien.
—Muchas gracias. Sí, me gustaba resolver problemas, digamos.
—¿Son carreras más prácticas de resolver retos?
—Sí, te preparas para resolver problemas, no puedes chapar. Es resolver las cosas y en el examen a ver qué sale de ahí. Era la filosofía que teníamos en Matemáticas.
—¿Fue fácil encontrar trabajo tras el máster? ¿Es más fácil en Reino Unido que en España?
—En mi sector oportunidades de trabajo también hay en España, solo que aquí están mucho mejor remuneradas. Cuando acabé el máster ya tenía una oferta de la empresa en la que estoy trabajando, pero estuve buscando unos cuantos meses para encontrar la que más me convenciese.
—¿Cómo es el proceso?
—Es normal que en el mundo de las empresas tecnológicas tengas que pasar muchas entrevistas, es algo normal en el sector. Las empresas publican ofertas, ya sea a través de plataformas o foros de trabajo, envías el currículo y luego un reclutador te llama, te pregunta un poco mas sobre él y se acuerda una primera reunión de toma de contacto con la empresa y luego algunas más. Algunas son pruebas técnicas en las que tienen que realizar diferentes ejercicios y resolver varias problemas para ver cómo te enfrentas a ellos y cómo piensas y luego una entrevista para saber cómo trabajarías en equipo y cómo te desenvuelves.
—¿Se imaginaba hace años trabajando en donde está?
—No sabía que iba a acabar en esta empresa en particular, pero me imaginaba que iba a intentar conseguir un trabajo en Londres o en Madrid, no tenía la seguridad de saber dónde estaría al final, pero Londres me gustaba. Está cerca de Galicia, se habla inglés, me gustaba la idea.
—¿Viene a menudo a casa?
—Suelo ir por Galicia una vez al mes, más o menos. Intento ir todos los meses. Los vuelos, por ahora, son baratos y es bastante cómodo, es como ir y volver a Madrid más o menos.
«Mi objetivo es volver a Galicia pero no sé cuándo»
En Londres, el clima, dice «es parecido al de Galicia, aunque en Galicia llueve más y aquí hace más frío». Lo que mas echa de menos, «es la comida española, la del sur de Europa no se puede igualar a ninguna de los sitios a los que he ido». Confiesa que de casa «me envían jamón y embutidos lalinenses, aceite español y cosas aquí. Aquí se pueden comprar algunas de esas cosas, pero son más caras, obviamente». Vive en la zona de Camden. En su tiempo libre, explica, «estudio el doctorado, voy al gimnasio y me gusta ver deportes, ver fútbol y Fórmula 1, sobre todo». En Lalín jugaba al fútbol y continúa con esa afición.
Se encuentra a gusto con la gente en Londres. Indica que «los ingleses son encantadores, aunque algo más fríos que los españoles, pero nos tratan bien». Como en cualquier ciudad cosmopolita en su máster «había gente de todo el mundo y en el trabajo, hay una mayoría inglesa, pero sí que hay bastante gente de India, de Italia, Holanda, Francia y otras partes de Europa».
Sus amigos están «algunos en Dublín trabajando en empresas tecnológicas, tengo amigos en Galicia que trabajan en hospitales o en empresas y los veo a menudo y mis compañeros de la carrera, la gran mayoría trabajan en Madrid». Su objetivo, señala, «siempre ha sido volver a Galicia, aunque no sé cuando si en 3, 5 o 20 años. Hay gente que conozco que dice que vino por poco tiempo y lleva 40, 50 años y yo pienso que igual me pasa, pero no es mi plan». Cree que en Galicia podrá trabajar pero «lo más probable sería emprender ahí o trabajar en remoto para otro lugar del mundo». Su trabajo lo permite.