A Estrada y Lalín apuestan por regularizar la instalación de terrazas
A Estrada
El gobierno lalinense retomó el pago de la tasa por ocupación de espacios públicos vinculado a los presupuestos del 2024. En A Estrada se recuperó en el 2022
21 Jan 2024. Actualizado a las 05:00 h.
La pandemia de coronavirus obligó a tomar algunas decisiones con el fin de favorecer a determinados sectores y tratar de reactivar como fuera la economía local. El de la hostelería fue uno de los más castigados por las restricciones, pasando de estar cerrados a cal y canto a abrir sus puertas únicamente para servir comida o bebida para llevar. La necesidad de evitar aglomeraciones en espacios cerrados para frenar los contagios clausuró el interior de los locales, pero a cambio florecieron las terrazas. La inmensa mayoría de negocios recurrieron a los espacios exteriores para capear el temporal, lo que contó con el respaldo del consumidor, ansioso por socializar y disfrutar del aire libre tras meses de encierro y restricciones.
Los concellos de la zona, conscientes de que las terrazas suponían un elemento fundamental para la supervivencia de la hostelería, aplicaron bonificaciones y derogaron el cobro por su instalación. Así, los locales pudieron sacar a la calle sus terrazas sin coste alguno y sin más límite que dejar el paso libre para el tránsito. Pero a medida que la situación epidemiológica mejoraba, se planteó la vuelta a la aplicación de la normativa previa al covid.
A Estrada fue el primer municipio de las comarcas que recuperó el cobro. Lo hizo entre junio y septiembre del 2022, haciendo la vista gorda en los primeros meses para hacer el trago menos indigesto. El año pasado fue el de la regularización de las terrazas de la hostelería estradense. Una medida que explicaban desde el gobierno local como carente de afán recaudatorio, con el fin de establecer unas normas que incentiven el terraceo y eviten diferencias entre locales.
El Concello trabajó en la aplicación de una reforma de la ordenanza para aplicar algunas bonificaciones del 50 % con las que fomentar la solicitud de licencia para todo el año y no únicamente para los meses de primavera, verano y comienzos del otoño.
Regreso con pequeños ajustes
Dos años después de A Estrada, Lalín aplicará de nuevo el cobro por la instalación de toldos y terrazas que había sido eliminada provisionalmente durante la pandemia. Se retoma vinculada al presupuesto del 2024. El edil de Urbanismo, Pablo Areán, incidió meses atrás, durante la presentación de los cambios en las ordenanzas municipales, en que se producirán ajustes que no afectarán de forma significativa a la recaudación. En concreto para fijar el cobro por los metros cuadrados reales que ocupan las terrazas, con una diferenciación entre tarimas cubiertas o abiertas.
En la capital dezana la aportación que supuso este impuesto dejaba en las arcas municipales entre 15.000 y 20.000 euros anuales. No obstante, en el ejercicio anterior la recaudación en este apartado alcanzó los 1.829 euros. Desde el Concello de Lalín no han señalado si aplicarán alguna bonificación similar a la de A Estrada.
En Silleda y Forcarei no se modificó la ordenanza fiscal y siguen sin cobrar a los hosteleros
En algunos concellos de las comarcas de Deza y Tabeirós-Terra de Montes no se ha vuelto a recuperar el cobro por las terrazas y continúan aplicando el modelo provisional como consecuencia del coronavirus. Así, en municipios como Silleda o Forcarei nada ha cambiado y tampoco parece haber una previsión para ello a corto plazo.
En el tercer ayuntamiento por población también se ha registrado un incremento exponencial del número de mesas y sillas en las calles tanto del casco urbano de Silleda como el de A Bandeira. El bum de las terrazas llegó para quedarse, y de momento desde el gobierno local no se han planteado una modificación. Por el momento seguirán sin cobrar tanto terrazas como venta ambulante hasta que se modifique la ordenanza regulatoria.
Lo mismo sucede en Forcarei, donde tampoco hay cambios. Según explican desde el Concello, no se han producido movimientos al respecto y se seguirá bonificando en el mismo grado que durante el covid. Estas medidas de apoyo a la hostelería también se aplicaron en Vila de Cruces.
La peatonalización como factor para el florecimiento de mesas y sillas en el casco estradense
El bum del terraceo en A Estrada es, entre otros factores, consecuencia de los procesos de humanización y peatonalización que se han llevado a cabo en los últimos años. De hecho, precisamente la expansión de las terrazas durante la pandemia sirvió como ensayo del corte del tráfico en las calles Ulla y Calvo Sotelo. Esta arteria principal del casco urbano, así como la Praza da Feira, el primer tramo de la Justo Martínez y la Serafín Pazo, son un espacio muy cotizado por los hosteleros para colocar las mesas y sillas.
Por ejemplo, si hacemos el ejercicio de contar cuántas terrazas hay desde la Farola hasta la Porta do Sol, las cuentas dan diez locales con este añadido. En la Praza da Feira son tres desde la ausencia de la Taverna da Feira; en la calle Justo Martínez son dos y en la Serafín Pazo, una. Siendo los lugares con mayor actividad hostelera de la localidad.