La Xunta da luz verde al proyecto de la línea de alta tensión O Irixo-Lalín

Con mascarillas, con la pandemia aún dejándose sentir, se presentaba hace casi tres años el proyecto modificado para la Línea de Alta Tensión entre O Irixo y Lalín. En concreto fue el día 24 de mayo del 2021 cuando Naturgy cedía después de años de presión social y política para cambiar el trazado inicial con el fin de salvaguardar enclaves naturales como Casas Vellas. Desde entonces se activaba un proceloso proceso administrativo para superar todos los trámites ante las distintas Administraciones, desde el punto de vista ambiental o energético y de servicios públicos afectados. Acaba de darse un paso ya casi definitivo para que la compañía eléctrica pueda licitar y ejecutar la instalación de esa LAT tan esperada para el anillado de Lalín, y evitar así un apagón en caso de alguna incidencia de gravedad en la única línea que suministra en la actualidad la energía desde Belesar.

El Consello da Xunta aprobó ya otorgar las autorizaciones administrativas previa y de construcción, así como declarar de utilidad pública esa línea de alta tensión tras la modificación del proyecto para enterrar el tendido en un tramo de 21,5 kilómetros. Da luz verde además de forma definitiva a la modificación del proyecto sectorial de incidencia supramunicipal de esta LAT, que atraviesa el municipio ourensano de O Irixo, así como los dezanos de Dozón y Lalín. El Diario Oficial de Galicia recogía ayer esa decisión del Gobierno gallego.

En octubre del pasado año se había conseguido superar uno de los escollos más relevantes para una infraestructura de distribución de energía eléctrica de esta envergadura, en concreto el medioambiental. Una vez modificado el proyecto sectorial se requirió comenzar con un nuevo estudio ambiental, al cambiar de forma sustancial la línea a instalar sobre la previsión inicial.

Informe ambiental, en octubre

La primera propuesta oficial para esa LAT se daba a conocer por la entonces aún Unión Fenosa en agosto del 2007, sometiéndose a información pública ese estudio ambiental en octubre de ese año. Después se tardó tiempo en conseguir la declaración de impacto ambiental favorable, en el 2013, que caducó al decidirse enterrar parte de la línea, presentándose en junio del 2021 el nuevo documento por parte de la empresa, que logró el informe definitivo el pasado día 2 de octubre del 2023 Ese nuevo documento ambiental estratégico recoge un plan de vigilancia, con distintos controles sobre la calidad del aire, arqueológico, hidrológico, del suelo o de la gestión de residuos, así como de la vegetación y fauna en la zona afectada por la ejecución de las obras de la LAT. Unos tienen carácter mensual y otros antes del inicio o al finalizar los trabajos, así como durante su propio desarrollo..

El acuerdo del Consello da Xunta incluye la declaración de utilidad pública de este proyecto, lo que lleva implícita la ocupación de bienes afectados a través de su adquisición por Naturgy o mediante proceso de expropiación forzosa. La relación definitiva de derechos afectados por esta línea de alta tensión para el procedimiento expropiatorio se corresponde con la presentada por la compañía eléctrica en diciembre del 2022.

Esos terrenos afectados corresponden en su totalidad al trazado por Dozón y Lalín. Son veinticuatro bienes de propietarios particulares o de alguna asociación de vecinos, catalogados en su totalidad como monte, de los que catorce corresponden a Dozón, mientras que diez se ubican en el municipio lalinense. Casi en la mitad de los casos hay afección tanto de suelo como de vuelo, en concreto en once, mientras que los otros trece bienes solo tienen afección aérea. La modificación del proyecto inicial supuso además reducir el número de bienes afectados por la línea, con 191 fincas que se «salvaron» a lo largo de su trazado.

Una actuación para atender los 14.000 puntos de abastecimiento en caso de incidencia

Desde Naturgy se pronunciaban respecto a este proyecto el pasado febrero, al anunciar la conclusión de las obras de mejora en la red en el municipio lalinense por un montante de 165.000 euros. Entonces, el delegado en Pontevedra de Unión Fenosa Distribución, Francisco Ramos, tildaba de imprescindible para Deza ejecutar esa línea de alta tensión O Irixo-Lalín, que permitirá cerrar el circuito que alimenta en la actualidad la subestación lalinense, cuando ahora solo llega energía de la línea de Belesar.

De esa forma se contaría con dos fuentes de alimentación eléctrica la a zona, que garantizaría el suministro aún en caso de incidencia en una de ellas para unos

14.000 puntos de abastecimiento en la zona.

El reciente acuerdo de la Xunta supone un impulso para ese objetivo, en espera de posibles autorizaciones, licencias y permisos ya en el ámbito municipal.