Los funcionarios tendrán congelado el sueldo por cuarto año consecutivo

Rajoy dio el martes la buena noticia en el Senado, pero se cuidó de confirmar la mala. Lo hizo ayer el Ministerio de Hacienda. A través de un comunicado de prensa, el departamento que dirige Cristóbal Montoro anunció que los 2,57 millones de trabajadores al servicio de las Administraciones públicas en España verán agravada con el mantenimiento de la congelación salarial en el 2014 la pérdida de poder adquisitivo que arrastran desde el 2010. Hacienda quiso endulzar esa restricción con la confirmación de que, tal como adelantó el presidente en la Cámara alta, el Gobierno no tocará las dos pagas extraordinarias.

Esta decisión volverá a agrandar la brecha entre los 87.026 empleados de la Xunta, que en el 2014 padecerán de nuevo la merma de las extras, y los 63.525 que trabajan en Galicia para la Administración del Estado (29.092), para los ayuntamientos y diputaciones (26.725) y para las tres universidades (7.708), que cobrarán esas pagas íntegras. El mantenimiento el año que viene del recorte que la Xunta ya aplicó este año en el único concepto de las nóminas que puede tocar, el complemento específico, implicará una rebaja media del 4 % en la retribución anual de sus empleados. Los sindicatos calculan que esa merma puede oscilar, en función de la categoría profesional de cada trabajador, entre los 400 y los 3.200 euros al año. De este modo, el recorte de las extras en el 2013 y el 2014 habrá costado al personal de la Administración autonómica hasta 6.400 euros. Es una situación de agravio para los trabajadores de la Xunta respecto a los que están al servicio del resto de las Administraciones en las cuatro provincias gallegas.

Llueve sobre mojado

Pero este tijeretazo no es el único. Todos los empleados públicos de España arrastran desde junio del 2010 el efecto del recorte del 5 % decretado por el Gobierno de Zapatero. A esa merma hay que sumar la retirada de la extra de diciembre del 2012 por parte del Ejecutivo de Rajoy. Además de estas deducciones salariales directas, incrementadas para los trabajadores de la Xunta por un recorte del 40 % de las extras, hay que considerar el efecto de las restricciones implementadas en las condiciones laborales. En el caso de Galicia, la Lei de Medidas Temporais no Emprego Público, eliminó 3 días de libre disposición y retrasó al día 21 de baja el cobro del 100 % de la incapacidad temporal, entre otros ajustes que el Gobierno de Feijoo prometió que revertirá cuando la economía gallega retome la senda del crecimiento, esto es, sin fecha concreta.

Las centrales sindicales cifran en un 30 % el poder adquisitivo perdido por los empleados públicos en Galicia en los últimos cuatro ejercicios.

Esta nueva medida, junto con otras como la reforma de las pensiones serán explicadas este viernes en el Consejo de Ministros en el que además se aprobarán los presupuestos generales del Estado para el 2014 que se apoyarán en un crecimiento económico del 0,7% previsto para el próximo año.