FROB y Banesco negocian ya la solución para las preferentes

El FROB (el fondo estatal de recate bancario) y Banesco, la entidad futura dueña de Novagalicia Banco, han comenzado a negociar la solución que se dará a las participaciones preferentes, un problema que afectó a más de 70.000 clientes de la entidad financiera. Se calcula que, tras las diferentes vías (arbitraje, canje por acciones, compra por parte del Fondo de Garantía, denuncia ante el juzgado...) aún quedan unos 30.000 con su dinero atrapado, o con notables pérdidas por este producto financiero complejo.

La intención de Banesco es tener lista esa solución en cuanto ponga pie, oficialmente, en Novagalicia (o como finalmente se llame la entidad, tras fusionarla con el Etcheverría, su banco en España). Fuentes consultadas tanto en el FROB como en Banesco sostienen que las conversaciones técnicas están abiertas desde hace varios días, sobre la base de una propuesta presentada por el equipo de Juan Carlos Escotet (el dueño de Banesco) hace algo más de un mes.

Este tema está al margen de las negociaciones que mantiene Banesco con Bruselas para modificar el plan de negocio para Novagalicia al que obligó la UE por el rescate bancario. La solución para las preferentes se lleva, según las fuentes consultadas, entre Galicia y Madrid, porque están fuera del term sheet, ese documento que regulaba el futuro de NCG.

¿Por dónde va esa propuesta? Banesco prefiere no dar ninguna pista. La subasta por la que se adjudicó Novagalicia contenía algunas cláusulas -idénticas para todos los aspirantes- con garantías para el comprador ante este conflicto. Así, el FROB se comprometía a pagar el 85 % de los quebrantos económicos que las preferentes le provocaran al futuro dueño. Por ejemplo, a través de sentencias judiciales.

Del Parlamento gallego salió ayer una señal positiva, con el acuerdo de todos los grupos políticos, para que los ahorradores que tienen atrapado su dinero en preferentes y otros productos híbridos puedan recuperar íntegramente sus fondos. El consenso se construyó a partir de una proposición de ley impulsada por el BNG, a través de la cual se reclama la modificación de media docena de decretos y varias leyes para dejar las quitas sin efecto.

En el texto legislativo alentado por los nacionalistas se pide que el acuerdo sea remitido al Congreso de los Diputados para su debate y tramitación, pues es esta la instancia donde se puede alterar la normativa estatal sobre la reestructuración bancaria. Pero ante el temor de que se consuma demasiado tiempo en este procedimiento, el portavoz del BNG, Francisco Jorquera, ya se anticipó reclamando que sean los propios grupos parlamentarios en Madrid quienes tomen la iniciativa para registrar una petición en el mismo sentido para agilizar así la entrada en vigor del acuerdo, siempre y cuando los partidos se pronuncien en el Congreso en el mismo sentido que lo hicieron ayer en el Parlamento gallego.

El texto definitivo plantea dos puntos. De un lado, que quienes adquirieron preferentes o productos similares «sen experiencia financeira» o que «non recibisen a información adecuada», queden al margen de la quita. Y del otro, que cuando concurran estas circunstancias, las entidades financieras proceden a la «devolución íntegra do nominal investido».