Treinta empresas crean un consorcio gallego para producir aerogeneradores marinos

La apuesta cada vez más países por el mar y el viento como fuentes generadoras de energía está en el origen de la creación del Galician Off Shore Energy Group (GOE), un consorcio formado ya por 32 empresas de la comunidad. Esta alianza pretende participar en concursos internacionales de proyectos de construcción y mantenimiento de parques eólicos marinos en la que colaboran Navantia e Iberdrola, y que explorará oportunidades en los principales mercados de la eólica offshore, como el mar del Norte.

Según las previsiones de este grupo empresarial, en la próxima década habrá instalados frente a sus costas de la UE más de 40.000 megavatios marinos.

En el GOE están los astilleros Metalships & Docks, Cardama y Nodosa; metalúrgicas como Servimar, Neuwalme, Vicalsa, lnstra, Aceuve, Tesol, Progener, Dinain, Tune Eureka, Ganomagoga e Industrial Recense; y la firma del sector de torres eólicas Gestamp Renewable Industries, con planta en O Carballiño.

Asime, la patronal gallega del metal, es la impulsadora principal del GOE, que acaba de participar en la Global Offshore Wind 2014 (GOW 2014) en Glasgow, Escocia -meca de la eólica marina- celebrada la pasada semana.

Potenciales auxiliares

La organización empresarial ha calculado que existen unas 250 firmas gallegas con capacidad para asumir proyectos relacionados con el mantenimiento o producción de componentes para este tipo de energía. Estas instalaciones se concentran en países como Reino Unido, Alemania y Dinamarca y se calcula que en los próximos años su desarrollo exigirá inversiones por valor de 150.000 millones de euros. En estos momentos, varios astilleros gallegos encabezados por Navantia, compiten por la fabricación de jackets (plataformas en las que van instaladas los aerogeneradores marinos), subestaciones eléctricas y buques instaladores. Además de la experiencia en la fabricación de todo tipo de buques y también de estructuras, Asime resalta el potencial y el conocimiento existente ya en en la industria gallega del sector eólico terrestre en el que viene trabajando desde hace décadas.