Escotet fecha la salida a bolsa de Abanca «más allá del 2018»

Cumplidos los dos años de su renacimiento, cuando implantó una nueva marca, otro equipo y estrategia comercial, Abanca mantiene inalterada la hoja de ruta trazada por su máximo accionista, Juan Carlos Escotet. Un camino que pasa por seguir en solitario, salvo que aparezca una oportunidad de compra, y por no precipitarse en el salto a los mercados cotizados. En el transcurso de la presentación de resultados, interpelado sobre este asunto, el vicepresidente de la entidad reconoció ayer que la intención de los accionistas es ir en algún momento a los mercados de capitales. Sin embargo, Escotet dejó claro que «no hay prisa y que no parece que sean los mejores momentos» por lo que salida a bolsa de la entidad «podría empezar a evaluarse más allá del 2018».

Abanca cerró el primer semestre del año con un beneficio neto de 186 millones de euros, lo que supone un 2,2 % más respecto al mismo período del 2015, según el balance divulgado ayer por la cúpula de la entidad.

Su consejero delegado, Francisco Botas, recordó que el beneficio está basado en un incremento del margen comercial recurrente del 14 % por un aumento del negocio tradicional y por unas menores provisiones. Aquí ha jugado un papel determinante el dinamismo en la concesión de créditos.

Especialmente significativo es el aumento de la financiación en el segmento de las empresas y de los autónomos, que ha experimentado un crecimiento del 29 % respecto al mismo período del año anterior. «Mientras la productividad crece un 9 %, los gastos de explotación se reducen en un 3 % gracias a las medidas adoptadas en aspectos como la reducción de servicios externos, optimización de grandes proveedores o austeridad», explicó el consejero delegado.

Los créditos concedidos alcanzaron un valor entre enero y junio de este año de 25.751 millones de euros, lo que representa un incremento del 6,6 %, y los depósitos se situaron en los 34.139 millones, lo que supone un 3,85 % más que en igual período del ejercicio anterior.

«En Galicia, primer mercado de la entidad financiera, Abanca dispone de una cuota de mercado del 31 % en crédito y del 41 % en depósitos, mientras que a nivel nacional las cuotas de mercado son del 3 % en los depósitos y del 2 % en créditos», explicó Francisco Botas.

Menos provisiones

En la cuenta de resultados semestral de Abanca se observa un aumento del 10 % en los ingresos por comisiones, hasta un total de 76 millones de euros. Un balance en el que el margen de intereses -diferencia entre ingresos y costes financieros de créditos y depósitos- también se reduce un 9 %, y en el que hay una acusada caída de lo destinado a provisiones, con un 158 % menos, y de impuestos a pagar, con un 47 % menos.

Abanca cierra la primera mitad de ejercicio con 10.968 millones de euros de liquidez, lo que revela, según Escotet, una estructura «sana» y un «interesante colchón de capital».

La cúpula, muy atenta a los procesos de fusiones

El nuevo proceso de concentración bancaria y los tambores de fusión que llevan tiempo sonando en el sector financiero tampoco parecen alterar en exceso la estrategia del banco gallego. Juan Carlos Escotet aseguró ayer que la entidad va a permanecer muy atenta, dada la holgada situación de liquidez de la que disfruta.

El banco tiene uno de los índices más elevados de umbral mínimo de capital exigido (CET1), con un 14,3 %, lo que supone que cuenta con 1.152 millones adicionales a las exigencias regulatorias, y que se sitúan en el 9,75 %. «Esa holgura nos permite observar con la debida prudencia y estar atentos a cualquier proceso de posible consolidación», dijo Escotet durante su comparecencia ante los medios. El vicepresidente de Abanca también lanzó una advertencia sobre el riesgo de algunas operaciones en el sector. «No necesariamente en las consolidaciones se pueden lograr las eficiencias que se esperan», dijo.

Con todo, Escotet reconoció que el colchón de casi 1.200 millones de euros con el que cuenta la entidad le brinda «unas oportunidades interesantes», por lo que habrá que estar atentos y caminar «sin prisa, pero sin pausa».

En línea con lo expuesto por Escotet, el consejero delegado de la entidad, Francisco Botas, recordó que los datos del primer semestre de Abanca evidencian que «nuestro crecimiento es sostenido y constante a lo largo del tiempo». Una frase que resume la estrategia trazada por Juan Carlos Escotet para el banco gallego.

El importe de los créditos dudosos se ha reducido un 22 % en el último año

La cúpula de la primera entidad financiera gallega resalta que Abanca continúa avanzando en la mejora de la calidad de sus activos y que lo hace a un ritmo superior al del resto del sector. Tanto es así que el importe de los créditos dudosos se ha reducido un 22 % a lo largo del último año y la tasa de mora ha descendido hasta el 7,6 %, por debajo de la media del sector. Según el banco, la mejora en la calidad de los activos se ha conseguido manteniendo «políticas de extremada prudencia». «La cobertura del crédito dudoso se ha situado en el 60 %, uno de los niveles más elevados del sector; y la de los activos adjudicados, cuyo peso se mantiene en el 1 % del balance y es una de los menores del sector, se sitúa en el 55 %».

Los directivos de Abanca insistieron en que la entidad cumple holgadamente los criterios de liquidez a corto y largo plazo fijados para el 2018 por el Banco Central Europeo (BCE).

Fidelización

A la hora de hacer balance del primer semestre del año, los gestores del banco hicieron hincapié en que Abanca sigue profundizando en su estrategia de diversificación de fuentes de rentabilidad mediante la venta de productos de valor añadido, lo que ha permitido incrementar los ingresos por comisiones.

«La estrategia de vinculación de la entidad está dando resultado con la captación de clientes de alto valor; en los últimos meses, más de 55.000 clientes adicionales han accedido al máximo nivel de vinculación gracias a la contratación de nuevos productos y servicios con la entidad», informan desde Abanca.

Fuera de balance

La dirección de la entidad explica que los productos fuera de balance, como es el caso de los fondos de inversión o de los planes de pensiones y seguros de ahorro, se consolidan como una alternativa a los depósitos tradicionales, con un incremento del 8,8 %, hasta situarse en los 4.378 millones de euros. Las ventas de seguros también han crecido un 39 % gracias, en parte, a la oferta de tarifa plana lanzada por la entidad, que permite agrupar los importes de todas las pólizas del año en recibos mensuales.

«Una de las claves del buen desempeño de Abanca es el especial refuerzo para hacer frente a la volatilidad de los mercados; el 82 % de los fondos comercializados por el banco se sitúa por encima de la rentabilidad media», explica la entidad.