El CES alerta del incremento de la desigualdad económica en Galicia
Economía
Asegura que las rentas por el trabajo están no han recuperado los niveles anteriores a la crisis del 2008
25 Oct 2019. Actualizado a las 11:48 h.
El peso de la remuneración de los asalariados en el conjunto de la riqueza de Galicia es cada vez menor. Al inicio del estallido de la burbuja inmobiliaria, en el 2008, las rentas generadas por el trabajo equivalían al 46,9 % del producto interior bruto (PIB). Diez años después, se sitúan en el 42,4 %. Esto significa que no solo no se han recuperado los niveles anteriores a la crisis, sino que se está cada vez más lejos en un contexto de recuperación del empleo, lo que da cuenta de la elevada precariedad laboral.
Estos datos se incluyen en la memoria del 2018 elaborada por el Consello Económico e Social, presentada ayer en Santiago. El organismo consultivo, presidido ahora por Agustín Hernández, exconselleiro del PP y excandidato por ese partido a la alcaldía de Compostela, ve «preocupante o continuo descenso do peso relativo da remuneración de asalariados no PIB e demanda que se avance cara un modelo de crecemento máis inclusivo, con menos desigualdades e cunha distribución da riqueza máis equitativa».
Tal y como aparece en el informe, los datos de la evolución de las remuneraciones de los asalariados contrastan con el recorrido que muestra el excedente bruto de explotación, es decir, las rentas empresariales, que en el período que va del 2008 al 2018 mejoran su aportación al PIB en 2,9 puntos, al pasar del 45 % al 47,9 %. A pesar de todo, el CES aprecia como positivo el incremento de la ocupación, aunque advierte de la constante pérdida de población activa que sufre la comunidad.
Género y territorio
La memoria anual del organismo consultivo pone el foco también en la necesidad de corregir la brecha de género. Y advierte de las dificultades para abordar un análisis preciso de los sectores productos, especialmente en el primario, donde no existen bases estadísticas que recojan de un modo diferenciado los datos para hombres y para mujeres.
En su informe, el CES advierte de su preocupación por la pérdida de población, sobre todo en el rural, y llama a la Xunta a aprobar medidas que favorezcan la natalidad, frenen la emigración e incentiven la vuelta de los que se marcharon fuera de Galicia.