La Eurocámara pide a los gobiernos emitir «bonos de recuperación» pero sin mencionar la «mutualización de la deuda»
Economía
Esta resolución no es vinculante, pero permite al Parlamento Europeo presionar a los jefes de Estado para acordar la semana que viene la emisión de deuda común para financiar el plan de recuperación
17 Apr 2020. Actualizado a las 18:31 h.
La mutualización de la deuda sigue agrandando la grieta entre los países del norte y del sur de Europa. Los tan manidos coronabonos que tanto pide el Gobierno de Sánchez. El Parlamento Europeo dio luz verde este viernes a una resolución que pide la emisión de lo que se ha bautizado como «bonos de recuperación». O lo que es lo mismo, un plan masivo de inversiones que impulse la economía europea tan trastocada por la pandemia del coronavirus. Eso sí, el texto en ningún momento menciona de manera explícita la mutualización de la deuda.
De hecho, los eurodiputados tumbaron este viernes una de las enmiendas propuesta por Los Verdes, que proponía que «una parte sustancial» de la deuda europea que se emitiese para financiar la reconstrucción económica fuese mutualizada. Esta modificación ha sido descartada por apenas 44 votos por la oposición mayoritaria de los grupos Partido Popular Europeo (PPE) y el liberal Renovar Europa. En estos dos grupos se enmarcan los populares españoles, así como los diputados de Ciudadanos. Pero también es importante destacar que en estas familias políticas también se incluyen a dos de los Gobiernos del Viejo Continente más críticos con la emisión conjunta de deuda (Alemania y Holanda).
En cuanto a los eurodiputados españoles, apoyaron la enmienda de Los Verdes el PSOE, Unidas Podemos, ERC y PNV, mientras que el PP y Ciudadanos votaron en contra y los representantes de Junts se abstuvieron.
La resolución había sido pactada previamente por cuatro de los grupos más mayoritarios de la Eurocámara (populares, socialistas, liberales y ecologistas), pero Los Verdes se han descolgado después del rechazo a su enmienda. En consecuencia, la resolución ha sido aprobada por un margen de diferencia menor de lo esperado: 395 votos a favor, 171 en contra y 128 abstenciones.
El presidente del Parlamento Europeo, David Sassoli, ha preferido dejar de lado esta división y ha destacado que la resolución final ha sido aprobada por una «amplia mayoría» de eurodiputados. «Queremos un gran esfuerzo de solidaridad», ha explicado el italiano.
Con esta resolución no vinculante, la Eurocámara trata de presionar a los jefes de Estado y de Gobierno para que en la videoconferencia del próximo jueves acuerden la emisión de deuda común para financiar el plan de recuperación de la economía europea. Esta posibilidad sigue generando una profunda división entre las capitales, con países como Países Bajos que se oponen incluso a que sea la Comisión Europea la institución que emita los bonos europeos.
El texto final acordado pide la creación de «un paquete masivo de recuperación y reconstrucción para inversiones que apoyen la economía europea tras la crisis» y que complemente a las actuaciones del Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE), el Banco Europeo de Inversiones (BEI) y el Banco Central Europeo (BCE).
Los eurodiputados apuntan que este plan debe estar activo «mientras dure la disrupción económica» derivada de la pandemia y debe estar financiado por un presupuesto aumentado de la UE a largo plazo (MFF) que además sirva para respaldar la emisión de «bonos de recuperación», es decir, deuda común europea.
No implica la mutualización de la deuda anterior
La resolución añade a continuación que esto no implica la mutualización de deuda anterior, en un gesto que claramente trata de convencer a los países del norte que se oponen frontalmente a los eurobonos o coronabonos, como Holanda, Alemania, Finlandia o Austria.
Los eurodiputados enfatizan en el texto que este plan de reconstrucción debe sustentarse en el Pacto Verde Europeo y la transformación digital, al tiempo que remarcan la necesidad de aprobar cuanto antes un Marco Financiero Plurianual (MFF) para el periodo 2021-2027. La crisis, subraya la resolución, «no es responsabilidad de un Estado miembro particular» y por tanto «el objetivo a medio plazo debería ser combatir las consecuencias del brote» de COVID-19. En este sentido, señalan directamente al sector bancario, al que piden que asuma un papel «proactivo» en la crisis permitiendo a empresas y ciudadanos afectados reducciones o suspensiones en el pago de deuda o hipotecas. También insiste en una de las recomendaciones que lleva varios días haciendo a este sector: suspender temporalmente el pago de dividendos y que se ofrezcan bajadas en tipos de interés relacionados con descubiertos en cuentas corrientes.
En la misma línea, la resolución enfatiza que la UE y los gobiernos europeos deben asegurar que las ayudas económica que se dirijan a empresas golpeadas por la pandemia se concedan «únicamente si se utilizan en beneficio de sus empleados» y si las firmas «se abstienen de pagar bonificaciones a sus directivos, practicar la evasión fiscal, abonar dividendos o de recomprar valores mientras reciban dicho apoyo».