Francia impone desde este sábado una tarifa de tres euros por recibir libros comprados en internet

Francia ha impuesto el cobro de una tarifa mínima de tres euros para el envío de libros comprados en internet. Esta medida, que entró en vigor este sábado, tiene como objetivo tratar de proteger a las librerías frente a la competencia que suponen Amazon y otras plataformas que operan en línea como Fnac.

El decreto del Gobierno galo fija la tarifa mínima que se debe cobrar en los 3 euros para todos aquellos pedidos inferiores a los 35 euros, una tasa en línea con la recomendación de la Autoridad de Regulación de Comunicación Electrónica, Correos y Distribución de Prensa.

Cuando el coste de los pedidos sea superior o igual a 35 euros, la tarifa mínima a aplicar será de solo 1 céntimo. La voluntad del Ejecutivo es incitar a los lectores a comprar más en las librerías. Tanto Amazon como Fnac no facturaban hasta ahora más que un céntimo por los envíos de libros.

Sin embargo, el Sindicato de la Librería Francesa (SLF), que reúne a los profesionales, estima que la nueva regulación se queda corta, teniendo en cuenta que a ellos un envío les cuesta de media 7,5 euros.