El acuerdo para embridar las cuentas camina hacia un nuevo Ecofin si no se alcanza «en días»

Se intentó en la noche del jueves, durante la cena informal que celebraron los ministros de Economía y Finanzas de los Veintisiete, y también en la mañana de este viernes, pero el acuerdo sobre las nuevas reglas fiscales —la negociación la ha dirigido la presidencia española del Consejo Europeo— ha quedado sin cerrar. A un paso, eso sí. Estará «en días», según señalaron tanto la Presidencia española como los representantes de la Comisión Europea (CE). Tan cerca está, que el texto está cerrado «al 90 %», después de que España llevara el jueves un nuevo documento con cambios —ajustes más duros— para acercar a las partes más distantes, Francia y Alemania.

 1. ACUERDO EN MENOS DE DOS SEMANAS

NUEVO ECOFIN

A tres semanas de que expire el año y vuelvan a entrar en vigor las obligaciones fiscales que la UE suspendió para que los países miembros pudieran hacer frente a la pandemia y la guerra de Ucrania, de no haber acuerdo estos días, se convocará un Ecofin extraordinario. Será entre el 18 y el 21 de diciembre, después del Consejo Europeo, tal y como confirmó Nadia Calviño, en su papel de presidenta del Consejo. De dicho Ecofin tendrían que salir las nuevas reglas, que se someterán a trílogo —negociaciones con comisión y el Parlamento Europeo— en los primeros compases del 2024.

Aunque la reunión no es «indispensable», ya que el acuerdo podría alcanzarse por escrito, el comisario europeo de Economía, Paolo Gentiloni, reconoció que es «muy posible» que se celebre.

2. NUEVA PROPUESTA

UN AJUSTE ANUAL DEL 1 % DEL PIB PARA LOS MÁS ENDEUDADOS

Desde que el pasado abril la UE puso sobre la mesa su primera propuesta para reformar las reglas fiscales, esas que fijan en un máximo del 3 % del PIB el déficit y en el 60 % la deuda pública de todos los Estados miembros, se han sucedido los cambios en ese borrador inicial para acercar posiciones. El punto de partida de la Comisión era pasar de la homogeneidad actual en la disciplina de las cuentas a unos ajustes más a la carta, aunque el ajuste sería de un mínimo del 0,5 % del PIB al año.

Sin embargo, la última propuesta planteada por España incluye un ajuste anual de la deuda equivalente al 1 % del PIB para los más endeudados (los que superan el 90 %, como es el caso de España, a la que le supondría un recorte de unos 12.000 millones al año), y de la mitad para quienes tengan una deuda entre el 60 % y el 90 %.

En lo que respecta al déficit, también se fija un ajuste anual de medio punto del PIB para quienes superen el 3 %.

El documento ha sido enviado a consultas a los Estados miembros para que se pronuncien.

3. SIN CONTROL ANUAL

REVISIÓN CADA CUATRO AÑOS, AMPLIABLES A SIETE

Los cambios en el corsé fiscal europeo también se extienden a la monitorización. Así, frente a la revisión anual que Bruselas hacía hasta ahora de los ajustes y el cumplimiento de los objetivos de deuda y déficit de cada país, el modelo que se aplicará desde el 2024 propone negociar con cada Estado sendas propias de consolidación fiscal para períodos de cuatro años, que podrán ampliarse hasta siete. El cumplimiento solo se tendrá en cuenta al final del período, no en cada ejercicio, lo que incrementa la autonomía del país a la hora de adaptar las políticas de ajuste.

4. EL CHOQUE

DISENSIONES ENTRE PARÍS Y BERLÍN

Las disensiones entre Francia y Alemania a cuenta de la dureza de los ajustes explican el retraso en la aprobación de la reforma de las reglas fiscales. Y es que ambos Estados aglutinan a sendos bloques de países. Mientras que Francia defiende un ajuste anual menor del exceso de déficit (del 0,3 % anual), para no congelar inversiones ni comprometer un crecimiento económico que no pasa precisamente en Europa por su mejor momento, Alemania abandera un control más duro y mayor recorte de deuda y déficit.

5. ACERCAMIENTO

ACORDADO EN UN 90 %

Los ministros de Economía y Finanzas de Francia y Alemania cifraban lo cerrado del acuerdo en el 92 y el 95 % respectivamente. Ya hay un «entendimiento común sobre las salvaguardias del déficit y la deuda» y ahora solo resta «calibrar» las medidas «de manera correcta».