El eólico gallego aspira a superar el bloqueo para volver a ser líder nacional

Galicia tiene viento, industria, conocimiento, experiencia y por eso cuanto antes debe recuperar la posición de liderazgo en el sector eólico que nunca debió perder». María Landeira, delegada de proyectos renovables de Naturgy en la comunidad, detalla los mimbres de los que dispone la autonomía para desarrollar un sector clave para acometer el proceso de descarbonización. Con esta misma tesis coincide Paula Uría, directora xeral de Enerxías Renovables e Cambio Climático de la Xunta, quien añadió que, además de todas esas características, también «tenemos excelentes trabajadores que se quieren quedar en Galicia y empresas que quieren invertir». Landeira y Uría participaron junto a Víctor Ledo, responsable de Industria en CC.OO. de Galicia; y Cristina Pedrosa, abogada de la Asociación Eólica de Galicia (EGA) en un encuentro celebrado en La Voz de Galicia sobre la situación del sector en la comunidad.

La directora xeral de Enerxías Renovables lamentó que la comunidad haya pasado de liderar el sector a nivel nacional a caer hasta el cuarto puesto en cuanto a la potencia instalada. «Ahora hay 190 proyectos eólicos en funcionamiento, con una potencia de 3.900 megavatios, y se han autorizado en los últimos dos años 136 nuevos, que suponen más de 3.000 megavatios más, pero no se están construyendo», subrayó, en alusión a la cascada de suspensiones cautelares de los proyectos por parte del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG). «El 80 % de los recursos están presentados por tres organizaciones», aseguró, para advertir de que «no existe un rechazo vecinal a la implantación de renovables en Galicia».

Como Uría, que lamentó que sin esta situación, la comunidad podría estar a la vanguardia de la descarbonización, el resto de los integrantes en el encuentro pusieron el acento en la inseguridad jurídica y la incertidumbre que reina en el sector. El bloqueo que sufre debido a la avalancha de contenciosos y recursos materializa «un posicionamiento contrario a la eólica sin medir las consecuencias temporales y también sobre la industria, la economía y sobre Galicia», afirmó la abogada de EGA. A Víctor Ledo le preocupan las consecuencias que puede tener este frenazo en seco al impulso a los parques y recordó que el recurso eólico «está muy vinculado al desarrollo industrial». En ese sentido, advirtió de que Galicia «corre el riesgo de perder el tren porque hay promotores industriales, no solo energéticos, que ya están buscando otras ubicaciones» ante la inseguridad jurídica que se da en este territorio.

«Ninguna inversión se va a mover cómodamente en Galicia por la judicialización» 

María Landeira apunta a otras consecuencias. «Las energías renovables son parte de la solución al problema del cambio climático. Es curioso ver que hay movimientos que se oponen a la implantación de renovables cuando el cambio climático provoca daños medioambientales irreversibles», subrayó. Además, incidió en las cifras del sector. «Hay mucha industria asociada, que genera empleo cualificado, con un 1,5 % del PIB. Es un impacto importante, ya que hay cerca de 5.500 empleos vinculados al eólico en Galicia», cuantificó la portavoz de Naturgy. Además afirmó que el eólico reporta a las Administraciones alrededor de 100 millones de euros en impuestos al año. «Si se estuviesen construyendo 2 gigavatios de los que están paralizados, los municipios estarían recibiendo cerca de 80 millones de euros en licencias de obras», afirmó, al mismo tiempo que destacó la importancia de los contratos de alquiler de los terrenos para las comunidades rurales. 

La incógnita de los plazos

La Administración, las empresas y los agentes sociales tienen el foco puesto en el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE), después de que TSXG le elevase una triple cuestión prejudicial relativa tanto a la exposición pública de los proyectos como a la disponibilidad de los informes sectoriales. «Las electrointensivas están viendo mermadas su capacidad de competitividad pero también estamos dejando pasar oportunidades de inversión. Estamos trabajando para que esta situación se desbloquee, pero nos preocupan los tiempos», afirmó Uría.

«El binomio entre energía e industria en Galicia está en serio riesgo»

El portavoz de Industria de CC.OO. recordó que algunas empresas energéticas han firmado acuerdos de suministro de energía verde a largo plazo con industrias ya en funcionamiento —como Alcoa— y con otras con proyectos futuros, que pueden verse comprometidas por el parón eólico. «Esta situación hace imposible que se cumpla la reivindicación de recuperar la cadena de valor íntegra, que se puedan fabricar aquí torres, palas y nacelles para los parques».

Tanto la Xunta como los promotores y la EGA luchan en los tribunales para defender el sector. Cristina Pedrosa insiste en que, paralelamente a esa vía, «necesitamos medidas activas que implanten procesos simplificados y ágiles para el sector». Uría apeló en este sentido al impulso de una nueva ley de simplificación ambiental.

Galicia es importadora de energía y más del 60 % del consumo es de origen fósil 

El portavoz de Industria de CC.OO. insistió en que la comunidad continúa teniendo una dependencia energética muy alta, «porque más del 60 % de la energía consumida en Galicia es de origen fósil, tanto de gas como de hidrocarburos». De ahí la necesidad de acelerar el despliegue de las energías renovables para favorecer la transición y la reindustrialización. Además, apostó también por la eólica marina y por la producción de combustibles alternativos para favorecer la descarbonización en el sector naval, como el hidrógeno y el amoníaco verde.

Para María Landeira, el desarrollo de las energías renovables tiene además otra vertiente que se reclama desde Europa. «Es importante autoabastecerse, ya se puso sobre la mesa de forma clara con la guerra de Ucrania», afirmó, aunque abundó en el mismo mensaje que Víctor Ledo: «Hay que desterrar la idea de que Galicia se autoabastece, porque somos importadores netos de energía primaria».

«Ejecutar un parque no supone algo irreversible, ya que es desmantelable»

También se destacó en la mesa el importante papel que juegan las fuentes verdes de generación. «Las renovables contribuyen a reducir los precios del mercado. La eólica fue la primera fuente en el 2023 y según un estudio de la Asociación Empresarial Eólica contribuyó a reducir el precio en un 19 %», afirmó Landeira.

Paula Uría aseguró que el Gobierno gallego quiere que se aproveche el recurso eólico «para generar un beneficio social y económico» en las zonas en donde se implantan los proyectos. También defendió el trabajo de la Xunta. «Los procesos de autorizaciones son largos y complejos, se someten a evaluaciones ambientales realizadas por técnicos independientes», afirmó.

«Es una cuestión ideológica la que está llevando a parar los proyectos»

«No podemos ser una isla en las garantías jurídicas en el país», advirtió Ledo, quien también puso de ejemplo la implantación del mayor proyecto de centro de datos del país en Aragón por su disponibilidad de energía verde y competitiva. Por ello, para Cristina Pedrosa, es urgente restablecer esa seguridad jurídica, ya que lamentó que mientras que en otras zonas del país los tribunales están dictando sentencias que permiten el desarrollo del sector. «Mientras que en Galicia tenemos paralización en otras comunidades hay pronunciamiento muy diferente», lamentó.

Todos ellos, sin embargo, expresaron su confianza en que los proyectos autorizados saldrán.