La Voz de Galicia

Mapfre y Sanitas no darán atención sanitaria al personal de Justicia y agravan la crisis de las mutualidades

Economía

ana balseiro madrod / lA voz
Juzgados de Plaza Castilla, en Madrid

Igual que ocurrió con Muface, cuyo concurso quedó desierto, las aseguradoras dicen que el servicio es deficitario

11 Nov 2024. Actualizado a las 19:25 h.

Suma y sigue en la crisis de las mutualidades que prestan asistencia sanitaria privada a los funcionarios. Al concierto de Muface, que la semana pasada quedó desierto, se suma ahora otro revés para los empleados públicos, ya que Mapfre —la principal aseguradora del país— y Sanitas no se presentarán al concierto para prestar atención médica a los funcionarios de la Administración de Justicia (Mugeju).

Se suman así a DKV, que tampoco presentará oferta para un servicio del que las aseguradoras llevan años denunciando que está infrafinanciado y que lastra sus cuentas.

Con la negativa de estas tres compañías, únicamente Adeslas y Asisa concurrirán a la licitación de Mugeju.

Mugeju es una mutualidad que depende del Ministerio de Justicia y que atiende a 91.000 personas —empleados públicos y sus familiares—, mientras que Muface cubre a casi millón y medio de funcionarios, desde policías a profesores.

 

Un servicio deficitario

El problema en ambos casos es el mismo: la falta de rentabilidad del servicio para las aseguradoras que prestan la asistencia sanitaria. El aumento de los costes —dice el sector—, marcados en los últimos años por la crisis inflacionista, no ha evolucionado de forma paralela a la revisión de la compensación económica que el Gobierno les ofrece al renovar los conciertos.

Eso fue lo que provocó una situación insólita en el medio siglo de historia de la atención sanitaria de las mutualidades de funcionarios, al quedar desierto el concierto de Muface, para el que ahora el Ejecutivo prepara una nueva licitación de urgencia mejorando hasta el 24 % la compensación a las interesadas.

En el caso de la Administración de Justicia, el servicio se seguirá prestando, ya que Adeslas y Asisa sí concurren, pero los funcionarios tendrán menos oferta de centros sanitarios a los que acudir, puesto que ya no podrán hacerlo a los de Mapfre y Sanitas.

Desde Mapfre hablan de «infrafinanciación crónica» para explicar su espantada. De este modo, la subida media de las primas propuesta por el Ejecutivo para los dos próximos años (del entorno del 17 %) no alcanzaba para cubrir los costes del servicio, afectados por la escalada de la inflación. «No se dan las condiciones suficientes para garantizar la calidad del servicio», abundan.

Desde Sanitas, la explicación es idéntica. «Las condiciones de la oferta no garantizan la prestación del servicio en las condiciones de calidad que [la compañía] considera necesarias», recoge Europa Press, citando fuentes de la firma.


Comentar