La UE acuerda un presupuesto para 2025 un 1,78 % más alto que el de 2024
Economía
Incluye fondos para países que enfrentan catástrofes naturales, como España
16 Nov 2024. Actualizado a las 13:07 h.
Los países de la Unión Europea y la Eurocámara llegaron este sábado a un acuerdo para un presupuesto de 2025 con 192.768,6 millones de euros en compromisos, un 1,78 % superior a las cuentas de 2024, con fondos para ayudar a los países que enfrentan catástrofes naturales, como España. El pacto prevé asimismo 149.615,7 millones de euros en pagos, informó el Consejo de la UE en un comunicado. Este año se han mantenido disponibles 800,5 millones de euros dentro de los límites de gasto del marco financiero plurianual actual para 2021-2027, lo que permite a la UE reaccionar ante necesidades imprevisibles, añadió el Consejo. Si se incluye esta cifra de instrumentos especiales fuera del marco financiero plurianual, el presupuesto de la UE para 2025 asciende a 199.438,4 millones de euros en compromisos totales y 155.209,3 millones de euros en pagos totales.
Como parte del presupuesto del año próximo, los negociadores acordaron adelantar créditos de pago por un valor de hasta 3.000 millones de euros para prestar apoyo a las regiones europeas afectadas por catástrofes naturales. De esta manera, una vez que se confirme la base jurídica, los Estados miembros podrán utilizar hasta el 10 % de los fondos existentes de la política de cohesión para prevenir y recuperarse de tales catástrofes, siempre que presenten un programa modificado a la Comisión, señaló por su parte la Eurocámara en otro comunicado.
La Comisión Europea propuso en julio un presupuesto para 2025 que contemplaba 199.700 millones de euros en compromisos (los recursos que se pueden asignar a programas), equivalente al 1,08 % de la renta nacional bruta de la UE, y 152.700 millones de euros en pagos (el dinero realmente desembolsado). Los Estados miembros propusieron en septiembre reducir estas cifras en 1.520 millones de euros y 876 millones, respectivamente mientras que el Parlamento Europeo reclamaba elevar el nivel global de compromisos a 201.000 millones de euros y los pagos a 153.300 millones, por encima de la propuesta de Bruselas. La Eurocámara se quejó de que los límites máximos siguen siendo muy bajos y expresó su preocupación por los «sobrecostes» de los intereses del fondo de recuperación Next Generation, que ascienden a unos 2.600 millones de euros, el «doble» de las previsiones iniciales de la Comisión. El Consejo, por su parte, llamó a centrarse en las grandes prioridades comunitarias a la hora de distribuir los fondos, criticó el uso excesivo del instrumento de flexibilidad -destinado a afrontar imprevistos- e insistió en no aumentar la carga para los Estados miembros en un momento en el que muchos tienen escaso margen fiscal, según trasladó el secretario de Estado de Finanzas húngaro, Peter Banai, cuyo país ostenta la presidencia del Consejo.
España expresó durante el debate entre países en la mañana el viernes su rechazo a la reducción del presupuesto para el Fondo de Garantía Agrícola, que da ayudas directas a los agricultores, mientras que se mostró favorable a aumentar la dotación de Horizonte Europa, Erasmus Plus, y los fondos para la gestión de las fronteras exteriores, la vecindad Sur de la UE y África subsahariana. Finalmente, el presupuesto acordado este sábado es «equilibrado» y «prudente», al dejar «suficiente margen financiero para responder a circunstancias imprevistas», dijo Banai. Y añadió que «se trata de un enfoque realista que tiene en cuenta el contexto económico y geopolítico actual y la necesidad de afrontar los nuevos retos que puedan surgir en 2025» y «prevé la financiación necesaria para la reconstrucción de los países afectados por catástrofes naturales».
El presidente de la Comisión de Presupuestos, el belga Johan Van Overtveldt, uno de los negociadores por parte de la Eurocámara, destacó que el pacto «demuestra la capacidad de la UE para actuar y adaptarse en estos tiempos de incertidumbre», como las guerras en Ucrania y Oriente Medio, las presiones migratorias, los desastres naturales o las presiones sobre la competitividad económica. El presupuesto de 2025 es el primero elaborado tras la revisión del marco financiero plurianual 2021-2027, que se actualizó en febrero pasado para incluir 50.000 millones de euros en ayudas para Ucrania y reforzar ciertas partidas prioritarias. La revisión ascendió a 64.600 millones de euros (descontando los préstamos a Kiev) y creó un sistema «en cascada» para pagar los intereses extraordinarios de la deuda del fondo de recuperación (estimados en unos 15.000 millones para el período). El Parlamento Europeo y el Consejo disponen ahora de catorce días para aprobar formalmente el acuerdo alcanzado. Se espera que el Consejo lo refrende el 25 de noviembre y que el Parlamento lo vote en su sesión plenaria prevista para el 27 de noviembre en Estrasburgo (Francia).