El programa Aquae STEM abrirá camino desde el colegio contra la brecha de género en la ciencia y tecnología

Romper una brecha de género profesional y aumentar la presencia de las mujeres en el campo de las ciencias y la tecnología. Este es el objetivo que persigue Aquae STEM, un nuevo programa educativo impulsado por la Fundación Aquae que se implantará en colegios de Santiago (Pío XII y Vilas Alborada), Pontevedra (Cabanas y Santo André de Xeve) y Ourense (Luis Vives, Santa María y Divina Pastora), así como en otros centros de Andalucía, Comunidad Valenciana, Murcia, Castilla-La Mancha y Castilla León.

La iniciativa pretende «fomentar as vocacións científicas e tecnolóxicas entre as alumnas», indicó el director regional de Viaqua, Julio Masid. Reparó en que crece la demanda de profesionales en estos dos campos específicos, así como en el de la ingeniería y matemáticas (englobados todos ellos bajo el término STEM), mientras que el número de jóvenes que optan por estos itinerarios formativos es cada vez menor y anecdótica la presencia femenina. De ahí nace la aspiración de impulsar las vocaciones STEM entre las niñas matriculadas entre segundo y sexto de primaria, cursos en los que «o alumnado é máis receptivo e permeable ás mensaxes», añadió, por lo que es una buena edad para «derribar estereotipos».

Impacto previsto

El programa, en el que aún pueden inscribirse otros colegios, tendrá una duración estimada de tres cursos y se prevé un impacto sobre 3.500 niñas por año (aunque implica también a sus compañeros, al igual que al profesorado y familias) de 50 centros españoles.

«É un interesante proxecto que tiven a oportunidade de coñecer de primeira man», afirmó la conselleira de Educación, Carmen Pomar. «Nunca está de máis incidir na fenda de xénero que hai nas vocacións STEM e en que é preciso revertila», añadió, al tiempo que defendió la necesidad de «buscar referentes femininas, e á vez cercanas, para que as alumnas comproben que o xénero non é un impedimento para ningunha carreira profesional».

En la presentación de Aquae STEM en Compostela habló Celia Castro, relatando su propia experiencia. La responsable técnica de Cetaqua aseguró que a la hora de elegir una carrera «te das de fronte con certos estereotipos. E eu, por sacar boas notas, parecía que tiña que estudar Medicina».

Leticia Rodríguez, directora de Desenvolvemento Sostible de Viaqua, explicó que el nuevo programa educativo consistirá en un conjunto de actividades prácticas, diseñadas para despertar el interés de las alumnas a través de la resolución de un reto vinculado al desarrollo sostenible, «utilizando a innovación e a creatividade como vehículos para inspiralas». Integrado en la materia de Ciencias da Natureza, Aquae STEM incluirá debates en el aula, workshops y actividades on-line.

Al igual que la anterior, tanto el orientador del colegio Santa María (como representante de los centros) y la concejala de educación de Santiago (de los ayuntamientos) repararon en la importancia de aportar las herramientas y la confianza necesaria a las alumnas para superar una brecha «fortemente enraizada» y «forxada dende a infancia».

Carlos Domínguez, del colegio marista, destacó cómo el Nobel en ciencias, física y química solo recayó en 17 mujeres hasta hoy y que estas solo representan al 27 % de los equipos investigadores, y en contadas ocasiones llegan a cargos directivos. «As desigualdades nunca se dan por casualidade», afirmó el orientador, quien considera que el hecho de este campo esté desfeminizado «constitúe unha perda para todos», además de un reto educativo. «Moitas das nosas escolas convertéronse en espacios demasiado formais, ríxidos e serios», concluyó, a la vez que que abogó por «romper coa estructura centrada na aula» y abrir la enseñanza a otros espacios. 

Noa Díaz, por su parte, insistió en que desde la Administración hay que apoyar a los programas complementarios a la formación reglada, «aínda máis cando abordan a igualdade», apostilló. Para la edila santiaguesa, es necesario reforzar la presencia femenina en los ámbitos del saber y del poder, donde «a distinción de roles é absurda», para lograr un mayor equilibrio entre hombres y mujeres en los núcleos de toma de decisión. La concejala puso en valor, por último, el compromiso de los contros implicados a la hora de dedicar «recursos e tempo, que non é precisamente o que máis teñen».