El PP de Ourense apuntala su feudo histórico y consigue un diputado más
Elecciones 2016
El PSdeG necesita 77 votos más que los populares en el CERA para recuperar un acta
26 Sep 2016. Actualizado a las 05:00 h.
La provincia de Ourense se mantiene como el granero de votos del Partido Popular y la circunscripción que sigue contribuyendo de forma ostensible a mantener la mayoría de los populares en el Parlamento de Galicia. Ni las campañas de las diferentes formaciones, con el PP en el centro de las críticas como nexo común, han logrado socavar la hegemonía que el partido ostenta en la provincia bajo la presidencia de José Manuel Baltar Blanco. Baltar hijo es a Feijoo lo que Baltar padre era a Fraga, y el PP ourensano no solo revalidó las cifras de la convocatoria de octubre del 2012 sino que los populares sumaron un diputado más: hasta las nueve actas en el Hórreo se van los populares, frente a las ocho de hace cuatro años.
Las cifras del PP bajo la dirección de José Manuel Baltar son inapelables: con 10.000 votantes menos que hace cuatro años, la despoblación y el abandono de la provincia de Ourense siguen pasando factura, el PP incrementó el porcentaje de votantes en la provincia y si en el 2012 habían conseguido 90.026 papeletas (el 49,15 %) ayer se fueron a los más de 92.000 votos (lo que supone más del 53 % de los emitidos).
Queda un fleco en el aire que no se resolverá hasta el próximo lunes. El PSdeG está a 77 votos de arrebatar la última acta al PP, por lo que el voto emigrante, con 3.700 solicitudes registradas, será decisivo en Ourense.
La división pasa factura
Los grandes derrotados del 25-S ourensano fueron los socialistas, que se dejaron miles de votos por el camino y dos diputados -que se repartieron a partes iguales PP y En Marea-. Los datos no dejan lugar a dudas: de 43.340 votos (23,67 %) a los poco más de 30.000 (algo más del 17 %). Las luchas fratricidas que se libran desde hace años en el PSOE ourensano, desde los tiempos de paquistas y pachistas, siguen desgastando al partido. Los pachistas fueron los manifiestos perdedores a la hora de la elaboración de la candidatura electoral, aunque los resultados dejan de nuevo al PSOE en el peor de los escenarios y en una vuelta a los viejos tiempos, aquellos en los que algunos prefirieron hacer saltar todo por los aires y empezar de nuevo antes que buscar acuerdos de consenso. Los pachistas se erigen en ganadores morales de la partida del 25S, una pírrica victoria a costa de perder un legado histórico y una presencia que le va a disputar la marea.
La fórmula de las mareas afianza claramente su presencia y apoyo en la provincia con la nueva marca electoral. En 2012 AGE consiguió llevar a David Fernández Calviño a Compostela y ahora dobla su presencia en el Parlamento: los casi 24.000 votos sentarán en la cámara del Hórreo a la directora teatral Ánxeles Cuña y al exalcalde de Manzaneda, David Rodríguez.
A la tercera fue la vencida y Noa Presas, cabeza de lista de los nacionalistas en las dos últimas generales, entrará en el Parlamento. El Bloque propició el relevo generacional, con la renuncia de Tareixa Paz, y los nacionalistas jugaron la baza del voto útil para contrarrestar al PP: el mensaje de los últimos días vinculada la representación del BNG a la pérdida del noveno diputado de los populares.
Democracia Ourensana, la formación liderada por Gonzalo Pérez Jácome confiaba en dar la sorpresa como en las elecciones municipales del 2015 -los resultados alzaron a Democracia Ourensana como la segunda fuerza- y sentar a su candidato en la cámara gallega. Finalmente no pudo ser y el abogado Miguel Caride se quedó lejos del acta como diputado autonómico.