El «Prestige» y otras catástrofes

Impactante protesta Un grupo de activistas de la asociación Ecologistas en Acción protagonizó ayer una impactante protesta para llamar la atención de los madrileños sobre la catástrofe del Prestige . Ataviados como los voluntarios que trabajan en las costas gallegas, con monos blancos manchados de fuel y mascarillas de protección, se descolgaron de lo alto de un céntrico edificio en obras que está cubierto por una gran malla con publicidad sobre Galicia. Una vez sobre ella, al eslogan «Galicia, más cerca» le añadieron «de la muerte». También añadieron una pancarta que reza «Multinacionales culpables». Un portavoz de la asociación, Santiago Marín , explicó así el sentido de la iniciativa: «Las grandes empresas energéticas son las mayores beneficiarias del transporte de mercancías tóxicas y las que más escapan de sus responsabilidades en este tipo de accidentes». Miembros de Ecologistas en Acción repartieron también bolsas con fuel recogido en Galicia, con el lema «distribuido por el Gobierno español», y esparcieron en la calle serrín impregnado de tinta negra a modo de chapapote. Triste recuerdo de Bhopal Cuando la atención mediática está centrada en una catástrofe, la que sacude a Galicia, llama a las puertas de Madrid el recuerdo de otra ocurrida hace 18 años y cuyos efectos perniciosos todavía permanecen: la fuga de gas letal ocurrida en una fábrica de Bhopal el 2 de diciembre de 1984, que costó la muerte a miles de personas en el país asiático. Una exposición recién inaugurada en la Escuela de Fotografía Centro Imagen de Madrid recoge las imágenes tomadas por el fotógrafo Raghau Rai al día siguiente de aquella tragedia, cuyas consecuencias padecen hoy 150.000 personas. Entre los primeros asistentes a la muestra, que permanecerá abierta hasta el próximo 17 de enero, ha estado el escritor Javier Moro , que dedicó a este asunto su libro Era medianoche en Bhopal , escrito al alimón con el autor francés Dominique Lapierre .