Rajoy se reunió con González el día que Aznar criticaba al Ejecutivo
España
El expresidente socialista llama la atención sobre la poca sintonía política entre los dos dirigentes populares
29 May 2013. Actualizado a las 07:00 h.
Después del aznarazo contra Rajoy, y de que Zapatero jurara fidelidad eterna al jefe del Ejecutivo, solo faltaba Felipe González para completar el enredo. El expresidente socialista echó ayer gasolina al fuego de las relaciones entre Aznar y Rajoy al revelar que el mismo día en que el expresidente popular comparecía en televisión para hacer una enmienda a la totalidad a la política del Gobierno, él se encontraba reunido en la Moncloa con el actual jefe del Ejecutivo.
«Cuando el río suena...», dijo González para confirmar implícitamente una información confirmada luego por fuentes de la Moncloa. «Sea cual sea el color del Gobierno, siempre estoy disponible para hablar y compartir con el presidente del Gobierno. Me corresponde como papel institucional», señaló en París, poco antes de intervenir en el foro Berggruen en el que también participó Rajoy. La alusión a esa buena sintonía política es más relevante si se tiene en cuenta que, según desveló el propio Aznar, solo ha hablado una vez con Rajoy desde que este es presidente.
«Obligado a salvar la patria»
González, que mantiene una pésima relación con Aznar, se mostró irónico sobre su regreso al primer plano político. «Si quiere volver, que vuelva, ningún problema, está muy bien, pero para competir como otro más», dijo. Aunque no pudo evitar añadir que lo que le inquietaría es que Aznar se sintiera «obligado» a un regreso «para salvar la patria». En todo caso, aseguró que él no tiene ninguna intención de volver, aunque sí está dispuesto a «cooperar y ayudar» al Gobierno, aunque «discrepe» de sus políticas.
Pero como la ola de ajustes de cuentas políticos afecta también al PSOE, González tuvo que responder a las descalificaciones que su ex mano derecha, Alfonso Guerra, vierte contra él en las memorias que ha publicado. «No he sido consciente», dijo sobre las críticas. «Estoy en París, no he visto ni tan siquiera la presentación y ni mucho menos he leído las memorias», añadió en lo que parecía un intento de pasar por alto las invectivas de Guerra, quien lo acusa de engañarlo reiteradamente. Pero no. González reservaba su particular venganza para el final. «No creo que vaya a dedicar lo que me queda de vida a leer esas cosas», dijo sobre el tercer tomo de memorias de quien fue su vicepresidente.
En el PP optaron por tratar de dar la vuelta a los argumentos de Aznar. Según el portavoz popular, Alfonso Alonso, si lo que el expresidente demanda son reformas, «tiene que sentirse bastante satisfecho de la labor del Gobierno» porque, según dijo, Rajoy está «cambiando el país».