UPyD quiere que los toros sean patrimonio cultural inmaterial español para evitar prohibiciones en las autonomías
España
La formación de Rosa Díez va más allá de la iniciativa ciudadana que busca declarar las corridas de toros como Bien de Interés Cultural
18 Sep 2013. Actualizado a las 20:12 h.
El grupo parlamentario de UPyD en el Congreso quiere que los diversos festejos taurinos y la tauromaquia en general estén protegidos como patrimonio cultural inmaterial español y que, por tanto, no puedan ser suprimidos por las comunidades autónomas. Así se recoge en la enmienda de totalidad con texto alternativo que la formación que lidera Rosa Díez ha presentado en el Congreso, yendo más allá de la iniciativa ciudadana que busca declarar las corridas de toros como Bien de Interés Cultural.
El resto de enmiendas, presentadas por Izquierda Plural, CiU y partidos del Grupo Mixto, van en sentido contrario. De hecho, IU-ICV-CHA, Esquerra Republicana (ERC) y Compromís-Equo plantean suprimir toda subvención pública a espectáculos taurinos e impedir su retransmisión por televisión.
En el texto de UPyD, se señala que «la fiesta de los toros, los diversos espectáculos y festejos taurinos populares y la tauromaquia en general, que comprende todas las expresiones sociales y culturales vinculadas a la lidia de toros, constituyen elementos del patrimonio cultural inmaterial español» en los términos reconocidos por la UNESCO.
A su entender, la Constitución otorga al Estado la «competencia exclusiva» respecto de la defensa del patrimonio cultural español por lo que las comunidades no pueden prohibir unilateralmente las corridas de toros como hizo Cataluña.
Por eso va más allá de la iniciativa ciudadana y aboga por coordinar acciones para proteger la tauromaquia en todo el territorio empezando por la realización de un registro nacional del patrimonio cultural español, incluyendo en el catálogo los festejos taurinos, para adoptar las correspondientes medidas de identificación, documentación, investigación y puesta en valor.
Por el contrario, en el texto alternativo presentada por IU-ICV-CHA se subraya que «las corridas de toros y otros espectáculos donde se produzca maltrato y muerte de un animal no podrán ser considerados en ningún caso como patrimonio cultural español», ni tampoco podrán formar parte de los contenidos educativos, «sin menoscabo del estudio que puedan merecer obras de arte independientemente de su temática». A partir de ahi, recalca que los poderes públicos no podrán destinar dinero público «bajo ningún concepto» para sostener corridas de toros y otros espectáculos donde se produzca maltrato y muerte de un animal.
Además, aboga por impedir que los menores de edad acudan a estos espectáculos y por prohibir su retransmisión en medios públicos y privados «durante el horario protegido o de especial protección para la infancia». Como Izquierda Plural, ERC tampoco pide expresamente la prohibición de las corridas de toros, pues entiende que esa decisión debe tomarla cada comunidad como ha hecho Cataluña, pero da un paso más y además de negar la protección cultural a las corridas de toros por ser «espectáculos violentos donde se lleva a cabo la tortura de los animales con instrumentos de acero cortantes hasta su sangrante muerte», fija «requisitos y límites» para la crianza del toro y para las actividades relacionadas con la tauromaquia.
Así, pretenden prohibir «todas las ayudas o subvenciones públicas» a las corridas de toros, a la cría de toros de lidia y a cualquier acto de difusión y publicidad de estos espectáculos taurinos, así como excluir a los criadores de toros de las ayudas de la Política Agraria Común y demás programas de asistencia de la Unión Europea.
Igualmente, Esquerra sostiene que las corridas de toros «pueden perjudicar seriamente su desarrollo físico, psíquico, mental y moral» de los menores por «la violencia gratuita que de ellas se desprende y por el proselitismo intrínseco del maltrato animal», por lo que rechazan su difusión entre los menores. Es más, propone cambiar la Ley Audiovisual para prohibir la emisión en abierto de contenidos audiovisuales que puedan perjudicar seriamente el desarrollo físico, mental o moral de los menores, y en ese apartado incluyen a las corridas de toros como las escenas de pornografía o la violencia gratuita.
También la coalición Compromís-Equo ha presentado un texto alternativo para dejar claro que «no podrá ser considerada Bien de Interés Cultural ninguna manifestación donde se haga del maltrato o la muerte de un animal un espectáculo» y que «en ningún caso se podrán destinar recursos públicos para el fomento y la celebración de corridas de toros».
Además, la formación adscrita al Grupo Mixto pide que los menores no accedan a las plazas de toros y que se prohíba expresamente la emisión en medios de comunicación de este tipo de espectáculos en horario infantil.
Por su parte, los nacionalistas de CiU han registrado una enmienda de totalidad en la que se centra en dejar claro que las competencias relativas a la regulación de las corridas de toros y espectáculos con toros corresponden a las comunidades autónomas en el caso, como ocurre con Cataluña, que hayan asumido en sus respectivos estatutos competencias exclusivas en materia de cultura, de espectáculos y de protección de los animales.
Eso sí, añade una disposición adicional para que el Gobierno adopte las medidas pertinentes para no emitir corridas de toros en horario protegido infantil en los medios de comunicación de titularidad estatal. Y si se retransmite alguna, que haya desconexiones territoriales para las comunidades autónomas que hayan prohibido las corridas de toros en sus territorios, como Cataluña.
Todas estas enmiendas de totalidad, que previsiblemente se debatirán la próxima semana en el Pleno del Congreso, pretenden tumbar la iniciativa pro taurina que reunió más de 650.000 firmas en toda España y que fue tomada en consideración con el voto de PP y UPyD y la abstención del PSOE.