Las claves del conflicto en Gamonal
España
La construcción de un bulevar en una de las calles más céntricas de este barrio de Burgos ha provocado una verdadera batalla que ya se ha saldado con más de 40 detenidos
17 Jan 2014. Actualizado a las 21:46 h.
El barrio burgalés del Gamonal ha conseguido copar numerosas portadas y ya se ha situado en el ojo del huracán mediático mostrando al mundo entero un conflicto que parece tener más profundidad y recorrido del que parece. Un tercio de los 180.000 burgaleses residen en este barrio mayoritariamente obrero y una práctica mayoría se opone a que el ayuntamiento se gaste 8,5 millones en convertir la la céntrica calle Vitoria -la principal arteria del barrio- en un bulevar.
La lista de detenidos -que ya alcanza las 40 personas- suma nombres con el paso de las horas y el balance provisional deja otras cifras realmente preocupantes: 13 policías, un bombero y un guardia de seguridad han resultado heridos en un conflicto que ya parece haberse convertido en una auténtica batalla campal.
Pero, ¿que se esconde detrás de esta protesta espontánea que ha conseguido unir por una causa a prácticamente un pueblo entero?
Un gasto «injustificado»
Los vecinos del Gamonal han llegado a calificar el gasto de 8,5 millones de euros como «injustificable». En un momento de crisis económica con recortes presupuestarios en prácticamente todos los servicios -y en un Ayuntamiento en el que muchos incluso llegan a asegurar que las cuentas están en una situación crítica-, no se entiende tamaña inversión en una obra que reducirá a dos los cuatro carriles actuales y que incluso suprimirá las plazas de aparcamiento -gratuitas- en superficie para crear 246 subterráneas.
Fin del aparcamiento gratuito
Uno de los puntos más polémicos es el que atañe a la eliminación de más de 300 plazas de aparcamiento gratuito, una situación que según explican, complica aún más los problemas de estacionamiento en un barrio que no precisamente se caracteriza por las facilidades para dejar el coche. Las plazas subterráneas que se crearán serán comercializadas por un precio que asciende a los 19.800 euros cada plaza. Además, los nuevos aparcamientos no serán en propiedad sino en alquiler por 40 años, por lo que muchos aseguran que no podrán ser vendidas con facilidad.
Los responsables, figuras polémicas
La firma encargada del proyecto está vinculada con el constructor Antonio Miguel Méndez Pozo, un empresario que además de dedicarse al ladrillo es dueño del Diario de Burgos, uno de los periódicos más leídos en la provincia. Según explican medios como El Diario, Méndez Pozo porta consigo una enorme mochila cargada de polémicas políticas y de alguna que otra condena. De hecho, el empresario local fue condenado por corrupción en 1992 a siete años de prisión por el llamado caso de la Construcción.
El periodista Ignacio Escolar, declaraba en su blog: «Los alcaldes cambian pero Méndez Pozo permanece. El Diario de Burgos un día calla y al otro destapa un escándalo con la factura telefónica de uno de los concejales del Ayuntamiento, casualmente uno con mala relación con el constructor», y añade: «De fondo de estos navajazos, un proyecto: el del aparcamiento en el barrio obrero de Gamonal».
Los medios de comunicación, se defienden
Ante las crecientes críticas que los trabajadores de Diario de Burgos han recibido, ya son muchos los periodistas que han alertado de los insultos y coacciones de las que han sido objeto en estos últimos días de conflicto. A través de un comunicado, el Comité de Empresa de Diario de Burgos ha querido mostrar su fuerte rechazo a las crecientes acusaciones que muchos vecinos han lanzado criticando la falta de objetividad del diario de Méndez Pozo.
«Apoyo unánime y sin fisuras de todos los trabajadores de la empresa a la labor profesional e independiente de los compañeros que, al margen de sus opiniones personales, han trabajado en los últimos días, como en las últimas semanas y meses, por entregar a los lectores de Diario de Burgos la información más completa y objetiva posible acerca del proyecto del bulevar de la calle Vitoria y la polémica que lo rodea», publicaban en su página web.
El Colegio de Periodistas de Castilla y León y la Asociación de Periodistas de Burgos también se han sumado a la denuncia por el «acoso» que están recibiendo los profesionales que cubren la información sobre las protestas ciudadanas en Gamonal.
El impulso de Internet
Además de las manifestaciones, algunos ciudadanos incluso han lanzado sus protestas a la web donde se ha creado una petición online de recogida de firmas en apoyo a la paralización del polémico bulevar. En pocas horas, ya son más de 22.000 personas las que se han solidarizado con esta causa. La petición online se inició en mayo del 2013 pero ha sido durante los últimos tres días cuando se ha recogido el grueso de las firmas, al registrar casi 10.000 en solo 24 horas.
Twitter y otras redes sociales han servido como el definitivo impulso que los ciudadanos de este barrio de Burgos necesitaban para trasladar sus preocupaciones al resto de la población española y los trending topic #Gamonal, #EfectoGamonal, #GruposViolentosItinerantes, Méndez Pozo, Ana Botella (fuertemente criticada en internet por condenar las protestas) y Burgos han sido las principales herramientas con las que los burgaleses han podido sumar apoyos a lo largo de toda la geografía a una causa que cada día se salda con más detenidos.
El alcalde apuesta por las obras
Frente a la reacción vecinal la respuesta del alcalde de Gamonal, Javier Lacalle (del PP), ha sido determinante. En su primera comparecencia pública se ha reafirmado en que «las obras no se van a paralizar» y se justifica asegurando que el proyecto estaba incluido tanto en el programa electoral del PP como del PSOE, que en las últimas elecciones sumaron cerca del 80 % de los votos en Burgos.
Algunos políticos del panorama nacional ya se han sumado a la condena de las protestas ciudadanas. «Claro que condeno los atentados de Burgos. Una cosa es una protesta ciudadana, que por supuesto es siempre respetable, y otra cosa es la violencia», declaraba Ana Botella.
La oposición, no está de acuerdo
A pesar de que el Gobierno ha asegurado que el PSOE también incluía en su programa la construcción del bulevar, el partido socialista asegura que, a pesar de que su idea era la de mejorar la zona, lo cierto es que han estado en contra de este proyecto desde que se presentó a concurso público en el 2011.
Los socialistas incluso llegaron a denunciar por la vía judicial un proceso de adjudicación que, según el portavoz municipal, Luis Escribano; incumplía las condiciones del pliego y el anonimato de las propuestas.
Por su parte, Izquierda Unida, ha emitido un comunicado en su página web en el que denuncia que el nuevo bulevar «embotellará la circulación debido a sus solo dos carriles y que el equipo de gobierno no ha hecho ningún esfuerzo por consensuar con la población si el bulevar, tal y como está diseñado, responde a las necesidades de los burgaleses.
La constructora exije seguridad
Después de varios conflictos, los vecinos han conseguido pralizar las obras a pesar de la fuerte insistencia de los mandatarios del lugar.
Por su parte, la empresa adjudicataria de las obras -que está formada temporalmente por Copsa y Aroasa- ya ha trasladado al Ayuntamiento que necesita unas condiciones de seguridad mínimas para los trabajadores que realizarán las obras del bulevar.