Guerra, al número dos de Podemos: «¡Están ustedes locos!»

El curso político ha arrancado y con esta peculiar vuelta a la rutina también regresan los ya tan típicos enfrentamientos dialécticos televisivos de los líderes de los principales partidos del país. El exvicepresidente del Gobierno con Felipe González, Alfonso Guerra, y el ideólogo y fundador de Podemos, Juan Carlos Monedero (que ya ha empezado a sonar como posible candidato a la alcaldía de Madrid), han sido los absolutos protagonistas del primer cruce de acusaciones de la temporada,

Un tenso -y bastante entretenido- debate, que ha tenido lugar en el espacio que Jesús Cintora presenta en Cuatro, se ha convertido en uno de los temas más comentados en las redes sociales, debido a una de las críticas nada veladas que a Guerra se le escapó en un momento de tensión: «Pero yo no estoy hablando de Podemos, pero qué obsesión. ¡Están ustedes todos locos!».

El exvicepresidente del Gobierno era entrevistado en Las Mañanas de Cuatro por un artículo que firmaba en la revista Tiempo en el que asegura que la política económica que aplican las instituciones europeas y los Estados miembro de la UE ha provocado que los «neofascismos» y los «neocomunismos» hayan «renacido de sus cenizas». Un escrito que en sí mismo conforma toda una declaración de intenciones, una llamada al bipartidismo para que comience a cambiar el rumbo en un intento de frenar el auge de Podemos.

Estas afirmaciones provocaron a Monedero quien decidió pasar al ataque y comenzar una verdadera guerra dialéctica. «Su partido ha sido el que ha apoyado la reforma del artículo 135 para dar prioridad al pago de la deuda por encima del gasto social. Resulta extraño que cualquier tipo de cambio suponga un regreso al pasado fascista o comunista», le espetaba el ideólogo de Podemos; una pelota que Guerra recogía para devolvérsela al de Pablo Iglesias: «Usted no ha leído mi artículo, y si lo ha leído hace una lectura interesada. Su obsesión hacia el PSOE no le autoriza a interpretar mi artículo de una manera incorrecta».

El constante cruce de mofas, en el que Monedero intentaba reconducir la conversación una y otra vez hacia las críticas de la casta a Podemos, llevó al ex secretario general socialista a estallar: «¡Pero qué obsesión! Que yo no estoy hablando de Podemos. ¡Están ustedes locos!».

La guerra estaba abierta. Ante el invariable recurso de Monedero, Guerra, harto de escuchar la manida palabra Podemos, se marcó un Francisco Umbral. «A mi me han invitado aquí para hablar de mi artículo, no para discutir de sus obsesiones personales», aseguraba el socialista, quien en otro momento volvía a criticar a Monedero por el continuo dirigir de la conversación hacia los lugares que precisamente a él le interesaban: «¡Otra vez con Podemos! ¡Deje de hacer propaganda de su grupo en esta conversación!».

El compañero de filas de Pablo Iglesias aprovechó la ocasión para instar al socialista a armarse de «coraje» y aceptar un debate con alguno de los miembros de su partido. Ante el reto, Guerra le respondió con una pregunta: «¿Qué se cree; que usted es el único valiente del mundo?». La provocación de Monedero seguía en marcha: «Es usted muy simpático, una persona muy entrañable»; una frase que terminó por hartar a Guerra quien pidió un poco de seriedad: «Boberías a estas alturas de mi vida, no».