Garzón rechaza sumarse a ningún «teatro» que enfrente a las clases populares de Cataluña y España
España
El candidato de Izquierda Unida mantuvo un encuentro cordial con Mariano Rajoy en Moncloa
02 Nov 2015. Actualizado a las 12:52 h.
El candidato de Izquierda Unida a la Presidencia del Gobierno, Alberto Garzón, ha pisado este lunes por primera vez a La Moncloa para trasladar al jefe del Ejecutivo, Mariano Rajoy, sus recetas frente al desafío soberanista planteado por Junts pel Sí y la CUP con la propuesta de resolución que registraron en el Parlament para iniciar el camino hacia la secesión de Cataluña.
Acompañado por tres miembros de su equipo de comunicación (jefe de prensa, community manager y un fotógrafo) Garzón ha llegado a las 09.54 horas al Palacio de la Moncloa para reunirse con Rajoy, que le esperaba en su interior y desde donde han posado para los fotógrafos.
El candidato de IU ha pedido al presidente del Gobierno que conduzca el problema de Cataluña con diálogo para evitar un «callejón sin salida» y ha urgido a poner en marcha una mesa de diálogo para facilitar un referéndum y un nuevo modelo de Estado.
En la rueda de prensa después de mantener su primera reunión con el presidente del Gobierno, que ha sido «cordial» y ha durado justo una hora, Garzón ha advertido que su formación no va a participar en «ningún teatro». El principal problema es entre ricos y pobres, y no entre España y Cataluña», ha enfatizado.
El dirigente de la federación de izquierdas ha dejado claro a Rajoy que la única salida posible a la crisis en Cataluña ha de ser «dialogada y negociada» pensando en las clases populares de Cataluña y el resto de España para evitar «los callejones sin salida» que significan que un problema de naturaleza «política» se resuelva «desde los tribunales».
Por ello, ha insistido en la necesidad de poner en marcha de forma inmediata una mesa de diálogo, incluyendo incluso a quienes «quieren incumplir la ley», que facilite la celebración de una consulta «con todas las garantías democráticas» que permita a los catalanes decidir sobre todas las cuestiones que tengan que ver con sus condiciones de vida, y no sólo sobre la cuestión territorial, y también para avanzar hacia un modelo de Estado federal que reconozca la «plurinacionalidad» del país.
Asimismo, Garzón cree que el reto soberanista supone una oportunidad para abrir un proceso constituyente para debatir «desde abajo» un «nuevo modelo de convivencia» en defensa de la clases trabajadora que desemboque en una Constitución federal que defienda de verdad todas las conquistas sociales que se han alcanzado en los últimos 40 años.
El presidente continúa este lunes la ronda de encuentros que inició el pasado martes, cuando recibió al jefe del principal partido de la oposición, Pedro Sánchez, al que siguieron, ya el viernes, el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, y el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias. Este martes, Rajoy se reunirá con los líderes de Unió (UDC), Josep Antoni Duran i Lleida, y con el de Unión, Progreso y Demcocracia (UPyD), Andrés Herzog.