La dirección del PP intenta acelerar los plazos del congreso
España
Los barones insisten en buscar una candidatura única
11 Jun 2018. Actualizado a las 05:00 h.
El PP afronta su elección más trascendente de la última década con la voluntad de minimizar los riesgos que conlleva. La junta directiva nacional fijará mañana la fecha del congreso extraordinario que designará en julio al sucesor de Mariano Rajoy. Además, el partido abrirá los plazos para la presentación de candidaturas, con la intención de acelerar el proceso lo máximo posible dentro de los estatutos del partido.
En las horas previas a que los aspirantes decidan postularse, altos cargos de la formación confían en que Alberto Núñez Feijoo y Soraya Sáenz de Santamaría, las dos opciones que la mayoría contempla como viables, no obliguen a la militancia a escoger entre uno o el otro. Desde que Rajoy anunció su retirada el 5 de junio, en el PP levantan el dedo índice para señalar el número de candidatos que esperan: «Una candidatura única». «Todos integrados bajo un nombre», dicen otros.
Otras fuentes populares defienden, sin embargo, que la concurrencia de alternativas daría más legitimidad al sucesor, pero comprenden que el deseo de la mayoría nace del temor a que una disputa entre dos primeros espadas quiebre las filas de un partido poco habituado a las batallas internas y que por primera vez entierra el dedazo como método de designación. «El PP juega en un contexto muy frágil -advierten sin olvidar que la formación tiene por delante la tarea de recuperar el centroderecha- y es lógico que no quiera follones». Acertar con el relevo de Rajoy e impulsar cabezas de cartel potentes para las elecciones autonómicas y locales del 2019 puede aliviar a los populares en su paso por la inhóspita oposición. En la organización conservadora tienen la convicción de que el proceso debe resolverse «rápido y sin errar», para no dar opciones al adversario y para poner a punto al partido antes de que Pedro Sánchez convoque las generales. Sea cuando sea.
Intercambio de pareceres
Esa inquietud que muestra el PP explica el fin de semana de intercambio de pareceres que han pasado los barones y cuadros de la formación. Ningún potencial aspirante ha dado un paso al frente. Quienes conocen al presidente de Galicia y a la exvicepresidenta del Gobierno creen que ambos se lo están pensando y aventuran que no entrarán los dos en campaña. «Si uno decide presentarse, lo sensato es que el otro se retire», apunta un diputado. «Supongo que llegarán a un consenso», coinciden varias voces. «Los dos son amigos de Rajoy y velarán por que su legado -defiende un dirigente territorial- no sea el de la división».
Ninguna de estas fuentes, en todo caso, contempla que aquel que no se postule ejerza de número dos del que se presente. Al menos, lo ven «muy raro y difícil». Más allá de las cúpulas, sin embargo, las facilidades que otorga el nuevo sistema de elección de líderes allana el camino para que surjan aspirantes que no están en las quinielas. Con cien avales basta para optar y someterse a una primera votación de la militancia. El senador y expresidente balear, José Ramón Bauzá, estudia presentarse. Fuentes de su entorno aseguran que se está «construyendo una corriente liberal» que podría impulsar su candidatura.
Feijoo pide «sete ou quince días» para aclarar su papel en el partido
En medio del silencio de los principales favoritos para relevar a Mariano Rajoy, el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, también optó por la prudencia y por respetar los plazos de su partido antes de hacer pública su decisión sobre si concurrirá o no a las primarias. Dijo ser consciente de que el partido acelerará los plazos, pero pidió «sete ou quince días» antes de expresar su posicionamiento. Feijoo animó a sus compañeros a dar un paso al frente con libertad, si entienden que son la mejor opción. «Todos los que crean que pueden aportar algo en el partido, trabajo, experiencia y liderazgo, y que tengan un compromiso con los millones de votantes, que presenten su propuesta, su equipo», indicó.