El marido de Ana Rosa Quintana queda en libertad sin medidas cautelares

El juez de la Audiencia Nacional Diego de Egea ha dejado este jueves en libertad al empresario Juan Muñoz, marido de la periodista Ana Rosa Quintana, así como a su hermano Fernando y a dos abogados de la familia, Ricardo Álvarez-Ossorio y José Miguel García González, detenidos el martes por haber contratado supuestamente los servicios del excomisario José Manuel Villarejo para realizar un chantaje. Muñoz es el único que sale sin medidas cautelares. Los otros tres arrestados deberán comparecer cada mes en el juzgado y deberán pedir autorización al juez en caso de querer salir del país. 

Los cuatro han declarado a lo largo de seis horas como investigados por delitos de descubrimiento, revelación de secretos y extorsión, en relación con el supuesto encargo que hicieron a Villarejo para lograr el cobro de una deuda, delitos que De Egea también le ha imputado este jueves al excomisario y a su socio, el abogado Rafael Redondo, los dos únicos que permanecen en prisión tras ser detenidos en noviembre en la Operación Tándem. Villarejo se encuentra en la cárcel madrileña de Estremera. 

En la que conversación que habrían mantenido con Villarejo, y que fue grabada, se habría hablado de un vídeo destinado a desprestigiar al exjuez Francisco Javier de Urquía, que debía una cantidad de dinero a los Muñoz. Urquía fue expulsado de la Carrera judicial en 2007 por aceptar dinero de uno de los investigados de la 'Operación Malaya'. Ahora mismo ejerce como abogado de otro empresario. Según fuentes presentes en el interrogatorio de este jueves, durante ese encuentro se habló de la existencia de unas imágenes en las que Urquía aparecería con prostitutas y consumiendo droga.