La Voz de Galicia

El nacionalismo catalán pasa del «España nos roba» a «nos colapsan los quirófanos»

España

cristian reino barcelona / colpisa, la voz
Rafael Ribó, Defensor del Pueblo catalán.

El Defensor del Pueblo catalán culpa a los pacientes de otras autonomías del déficit de la sanidad pública en la región

10 Dec 2019. Actualizado a las 05:00 h.

El Síndic de Greuges, el Defensor del Pueblo catalán, Rafael Ribó, antiguo dirigente de Iniciativa per Catalunya, salió ayer en defensa del Gobierno catalán, minimizando las listas de espera que hay en Cataluña, que se sitúan a la cola de España, y culpando a los pacientes de otras comunidades autónomas que se operan en los centros hospitalarios del servicio catalán de la salud de los problemas de financiación de la sanidad catalana.

«Uno de los déficits que tiene la sanidad pública catalana es que tiene un sobrecoste con la gente que viene a intervenirse», ha asegurado.

En materia económica, el nacionalismo catalán ha pasado del «España nos roba» y del problema es el déficit fiscal y el expolio fiscal a una especie de la culpa de que los quirófanos de Cataluña estén colapsados es de los españoles de otras comunidades autónomas que deciden operarse en Cataluña.

Según los datos del Sistema de Información sobre las Listas de Espera en el Sistema Nacional de la Salud (SNS) publicados por el Ministerio de Sanidad, Cataluña lidera el ránking, en negativo, pues tiene 168.000 pacientes en espera de ser intervenidos, 50.000 más que Andalucía, si bien ambas comunidades son las más pobladas. Pero en Cataluña, la media para ser operado es de 146 días, 30 más que la media española, y las listas de espera tienen una tasa media de 23 pacientes por cada mil habitantes: la más alta de toda España.

A pesar de los datos, Ribó cree que el problema de la sanidad catalana es que los pacientes del resto de España quieren operarse en Cataluña. «Las cifras pueden ser interpretables en muchas direcciones. La sanidad en Cataluña es de un calidad excelente. La prueba es que vienen de otras comunidades autónomas a intervenirse», ha señalado en la Ser. «Yo no sé si es la lista de espera más larga. Depende de cómo lo enfoquemos. Pero lo que le puedo garantizar es que uno de los déficits que tiene la sanidad pública es que tiene un sobrecoste por la gente que viene a Cataluña a intervenirse», ha rematado. 

¿Ha reducido Cataluña la inversión en sanidad?

Las afirmaciones de Ribó son desmentidas por las cifras que la propia Generalitat maneja. Cataluña ha sido la comunidad que más recortes ha aplicado en sanidad durante la crisis. De los 10.000 millones que se redujo la inversión en la sanidad pública en toda España entre el 2009 y el 2015, la mitad se perdieron en Cataluña. Y el consejero Toni Comin (2016-2017), huido a Bélgica, no fue capaz de revertir la situación.

Las enormes listas de espera del sistema de salud catalán van acompañadas de una inversión del 27,5 % inferior a la que había antes de la crisis. Y es que el sistema perdió de golpe 1.500 millones de euros del presupuesto en el 2010 y, aunque fueron parcheados en el 2017 con 70 millones, no se recuperó. 

¿Está la Generalitat adelgazando la Administración?

La política de la Generalitat de adelgazar el número de funcionarios iniciada en el 2010 y que desde ese año hasta el 2015 perdió cerca de 7.000 empleados públicos, no ha variado. Y el 55 % de esa reducción se aplicó en sanidad y educación. Solo los bomberos y los Mossos han visto incrementado su personal.

 

¿Puede cualquier español ser operado en un hospital público catalán?

En teoría sí. Pero para ser atendido por un médico de familia que derive al paciente a un hospital hay que cumplir una serie de requisitos como estar empadronado -lo que requiere un vínculo en el municipio en cuestión- para obtener la tarjeta sanitaria catalana; y tener asignado médico de cabecera si se es desplazado, excepto si es un caso de urgencia médica. Además existe un Fondo de Cohesión Interterritorial con una cantidad establecida anualmente en los Presupuestos Generales del Estado.


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