La Voz de Galicia

«Isto levámolo con pena, nas zonas afectadas todos temos coñecidos»

España

Santiago Garrido La Palma / Enviado especial
Francisco Jaime López, natural de Marín, y residente en La Palma desde hace 20 años

Así lo expresa Francisco Jaime López, un gallego de Marín que lleva 20 años en La Palma

24 Sep 2021. Actualizado a las 05:00 h.

Francisco Jaime López, de Marín, es de los gallegos veteranos en La Palma, porque lleva ya veinte años en la isla. Forma parte de un grupo que llegó en su momento con del bum de la construcción, si es que puede considerarse como tal en un territorio en el que no hay grandes bloques de edificios, sino multitud de viviendas unifamiliares o edificaciones de mediano tamaño. Nada que ver con lo que pasó en Fuerteventura, pero sí en pequeña escala. «A maioría desa xente xa marchou toda», explica.

Antes se contaban por centenares, y la reforma y ampliación del aeropuerto, en varias fases, llevó a decenas de gallegos a esta isla. Francisco explica que los que se quedaron lo hicieron porque tenían su familia hecha y les gustó el lugar, como le pasó a él, pero reconoce que la colonia gallega no es ni de lejos la que fue.

Plenamente integrado, reconoce que acontecimientos como el del volcán se llevan mal: «Home, isto lévalo con pena, porque nas zonas afectadas todos temos coñecidos», explica. De ahí que no dudase en llevar ropa y comida a un polideportivo en el que se recogían estos donativos para los vecinos más afectados. Al contrario que muchos palmeros, él no fue a El Paso ni a Los Llanos a ver las erupciones de lejos. «Coñezo esa zona, pero de momento prefiro non achegarme, xa irei máis adiante», indica.

Y, como todos, no está tranquilo. «Hai ambiente de preocupación polo que poida pasar, que xa pasou moito porque bastante xente quedou sen todo», asegura.

También es veterano, aunque no tanto, el carballés Miguel Puga, que lleva ya 17 años en la isla, y además la recorre constantemente, ya sea haciendo senderismo o como campista. Es un enamorado de La Palma, de los paisajes, el clima y la gente. En ese afán de conocer los montes insulares, no hace tanto que pasó la noche no lejos del punto donde ha comenzado la erupción, en el parque de Cumbre Vieja, y en el área cercana a Cabeza de Vaca, en los Llanos de la Bruja, en lo que era una ladera. «La naturaleza provocó que empezara a salir lava por esa zona, el domingo lo vi así y era impresionante, y ahora ya tiene forma de volcán, con esa boca volcánica, pero antes no lo era. Hace una semana estaba llena de pino canario», explica.

Señala que el domingo y el lunes fue toda una conmoción para muchos, ya que poca gente recordaba la erupción anterior. «La sensación ahora es de amargura, de tristeza y de pena. Muchos han perdido todo», apunta.


Comentar