La Voz de Galicia

Pablo Iglesias, «arrepentido» de ascender a Yolanda Díaz: «Ha trabajado con mafiosos para destruir a Podemos»

España

La Voz Redacción / Colpisa
Yolanda Díaz saludando a Pablo Iglesias en el Congreso, en enero del 2020

«Confiaba en ella y en que respetaría el peso democrático de Podemos», ha declarado el fundador de este partido

27 Nov 2023. Actualizado a las 16:13 h.

«Ha trabajado para destruir a Podemos aliándose con mafiosos». Así de categórico se ha mostrado Pablo Iglesias sobre Yolanda Díaz. Es más, el fundador del partido morado y exvicepresidente del Gobierno ha expresado su «arrepentimiento» por haber convertido a la actual líder de Sumar en su sucesora.

En una entrevista publicada en el Diari de Barcelona, Iglesias confiesa sentirse traicionado por Díaz, ya que «confiaba en ella» y esperaba que respetaría el peso democrático de Podemos. Lamentó haberla ascendido sin dejar atado «un proceso» asambleario en la formación que ahora dirige Ione Belarra.

El fundador de Podemos considera, en todo caso, que fue «un acierto» entrar en el Gobierno de Pedro Sánchez en el 2019 porque «te da una experiencia de gestión de enorme importancia». «Hemos visto al Estado mucho más de cerca, tanto las estructuras que dependen del Gobierno como las estructuras del Estado ajenas a él, y una izquierda que no aspire a ser Estado no tiene posibilidades de transformar prácticamente nada», ha añadido.

Solos en las europeas

Pablo Iglesias considera que sin ese paso «no existiría Yolanda Díaz». Y aprovecha para lanzar un reto a la ferrolana, al considerar que Sumar no es capaz de plantarle cara al poder. Iglesias propone que Podemos vuelva a ser una «opción electoral autónoma» para «hacerse visible» en las europeas del 2024. Y sobre una posible vuelta a la política, lo descarta de forma categórica: se siente «más útil, más feliz y más cómodo« en su medio, Canal Red.

Sobre su papel en los primeros años de vida de Podemos, Iglesias recalca que «si pudiese volver atrás, no lo repetiría». «No le deseo a nadie esta experiencia. De alguna manera me alegro de tenerla porque me ha ayudado de cara a los proyectos que estoy haciendo ahora, tanto como profesor de políticas como director de Canal Red, pero no querría vivirlo de nuevo. No ha sido nada agradable. Perder por completo la intimidad, tener que seguir trayendo escolta, la presión que ha recibido mi familia y convertirte además en un objeto permanente de agresividad mediática personalmente es muy duro».


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