Las fragatas F-104 y F-101 y el «Cantabria» entran en un adiestramiento avanzado

Los ejercicios denominados Gruflex, que se desarrollarán en breve en aguas del sur del país, reunirán tres unidades con base en Ferrol.

La Armada se limitó ayer a señalar que se trata de unos ensayos de «adiestramiento avanzado» y confirmó la presencia de la fragata Méndez Núñez (F-104). Si no surgen imprevistos, no obstante, se cuenta también para esas pruebas con la Álvaro de Bazán (F-101); y el buque de aprovisionamiento en combate (BAC) Cantabria, además de otras unidades de la Marina que no tienen su base en Ferrol.

Aunque desde Defensa todavía se tiene que detallar en qué consistirán exactamente las maniobras, se antojan ambiciosas por la presencia de dos de las fragatas F-100 y del buque de aprovisionamiento en combate, que amplía el abanico de ejercicios que se pueden realizar, además de cumplir su misión de suministrar en alta mar combustible, pertrechos, víveres, munición o asistencia sanitaria a las dotaciones de los barcos de guerra que acompaña en cada navegación.

Puertas abiertas en Cartagena

La Armada también informó de que, antes de participar en las mencionadas maniobras, la fragata F-104 hará una escala logística y de descanso de la dotación en Cartagena, escala que se prolongará desde hoy mismo hasta la tarde del día 9, permaneciendo atracada, durante esos días, en el muelle de Cruceros del puerto de Cartagena.

El buque podrá ser visitado entre el sábado 6, día de la Constitución, y el lunes 8, día de la Inmaculada Concepción, por la mañana, de 10.00 a 13.00 horas y, por la tarde, de 16.00 a 17.30 horas.

Preparativos para la F-102

Por otro lado, la Armada tiene programado que la fragata Almirante Juan de Borbón (F-102) llegue a Ferrol entre el 18 y el 19 de este mes tras cuatro meses de despliegue con la flota permanente de la OTAN SNMG-2, período al que hay que sumar las calificaciones y adiestramientos previos para poder ingresar en esta fuerza naval de la Alianza Atlántica.

La fecha exacta de llegada todavía no está totalmente cerrada, a expensas de las decisiones oportunas por parte de la OTAN. Si no surgen imprevistos, y como es habitual, habrá una recepción oficial por parte de autoridades militares cuando arribe al Arsenal ferrolano.