Ferrol no tendrá Semana Santa por el coronavirus por primera vez en 48 años

Por primera vez en 48 años, Ferrol se quedará sin Semana Santa. El Concello comunicó este mediodía que el Ayuntamiento, el Obispado de la Diócesis de Mondoñedo-Ferrol y la Junta General de las Cofradías acordaron esta mañana la suspensión de todas las actividades relacionadas con esta celebración religiosa. Los tres organismos preveían dar a conocer esta decisión el próximo lunes, pero la sucesión de los acontecimientos y el decreto del Gobierno que se dará a conocer esta tarde hicieron que se anticipase la decisión.

Si el coronavirus es ahora la causa de la suspensión, en 1972 fue también otro motivo de fuerza mayor, aunque de una naturaleza bien distinta, la que obligó a cancelar la celebración religiosa. En aquella ocasión, los sucesos del 10 de marzo, en el que la policía franquista mató a dos obreros de Bazán durante una manifestación laboral, hicieron que la Semana Santa no se pudiera celebrar. 

La Junta General de Cofradías y Hermandades de la Semana Santa de Ferrol manifestó ser consciente no solo del impacto religioso, sino social y económico que esta medida supone para la diócesid y, en particular, para Ferrol. «É unha medida dolorosa, pero ante a que todos estamos unidos neste delicado momento, cun espíritu cívico e cunha xenerosidade que é xusto recoñecer e agradecer. Coincidimos na necesidade de contribuir ao ben común, que é o que nos moveu a tomar esta decisión, a cal adoptamos con responsabilidade e esperanza», señaló en un comunicado. Asimismo, trasladó que desde este momento se pone a trabajar «coa ilusión intacta» para poder tener en 2021 «unha Semana Santa esplendorosa». Se celebrará el próximo año del 28 de marzo al 4 de abril. «Faltan 378 días. ¡Comienza la cuenta atrás!», trasladan.

Tampoco Ares tendrá Semana Santa este año. La Cofradía de Jesús Nazareno y Soledad de Nuestra Señora comunicó este mediodía que su junta directiva decidió la suspensión de todos los actos programados. Se trata, indica en un comunicado, de una «dolorosa decisión» que se adopta «en atención a las recomendaciones de las autoridades sanitarias, la Xunta de Galicia, el Concello de Ares y la autoridad eclesiástica de la Diócesis de Santiago de Compostela». El colectivo exhorta a la población a cumplir las indicaciones de lor organismos competentes y a que se acaten las normas de seguridad.