Arte renacentista y murciélagos en Pesqueiras

La Secretaría Xeral de Cultura y la Dirección Xeral do Patrimonio Cultural estudiarán medidas para mejorar la accesibilidad a la iglesia románica chantadina de Santa María de Pesqueiras, armonizándolas con la conservación de una colonia de murciélagos asentada desde hace mucho tiempo en este edificio, cerrado al culto desde 1968. Los titulares de ambos departamentos, Anxo Lorenzo y María del Carmen Martínez Insua, visitaron ayer la iglesia a petición de la asociación Amigos do Románico da Comarca de Chantada, a fin de examinar su situación actual y de recoger las propuestas de actuación de este colectivo.

La visita fue guiada por la presidenta de la asociación, Beatriz Pérez, y el escritor chantadino Xosé Lois García, miembro de esta entidad y estudioso del patrimonio románico de la zona. Por una parte, pidieron que el interior del templo sea dotado de iluminación eléctrica para que se pueda observar en buenas condiciones el importante conjunto de pinturas murales renacentistas que decoran el ábside y que constituyen uno de los principales valores artísticos del monumento. A este respecto, recordaron que estas pinturas fueron sometidas en el 2008 a una restauración integral que fue financiada íntegramente por la Xunta.

Por otro lado, Pérez y García solicitaron que se acondicionen y se señalicen los accesos a la iglesia, situada en un paraje aislado a unos cuatrocientos metros en línea recta del núcleo de población más cercano. Al lugar solo se puede acceder por caminos de tierra que en algunos tramos presentan malas condiciones y actualmente no hay ningún letrero que indique cómo llegar a la iglesia.

Visitantes frustrados

García, que tiene previsto publicar próximamente un libro sobre los murales de Pesqueiras, indicó por otro lado que «cada ano hai moitas persoas que se interesan por visitar esta igrexa, pero unha grande parte delas desisten cando se dan conta das dificultades que hai para dar con ela e de que non é posible vela en boas condicións».

Por su parte, Anxo Lorenzo dijo que su departamento tomará en consideración estas peticiones y que intentará contribuir a mejorar las condiciones de visitabilidad de la iglesia en la medida en que lo permitan las disponibilidades presupuestarias. Lorenzo añadió que en las actuaciones que puedan llevarse a cabo habrá que tener especialmente en cuenta la protección de la población de murciélagos que alberga el edificio. «Hai que lembrar que a igrexa non ten só ten un importante patrimonio cultural, senón tamén un patrimonio natural, porque aquí viven animais dunha especie protexida e sobre esta colonia de morcegos hai unha cautela da Consellería de Medio Ambiente», señaló.

Los murciélagos anidan en las vigas del techo de la nave de la iglesia, que actualmente está separada de la cabecera por una malla mosquitera de grandes dimensiones. Con ello se impide que los animales puedan dañar las pinturas murales del ábside al colgarse de la bóveda o ensuciarlas con sus excrementos.