Clesa, un año en manos de Feiraco
Firmas
Hace doce meses se materializaba en una notaría de Madrid la compra de la fábrica
19 Jul 2013. Actualizado a las 07:00 h.
La planta de Clesa en el municipio de Caldas de Reis estrenaba hace hoy justo un año nueva propiedad. La factoría láctea ubicada en la parroquia de Saiar volvía a manos gallegas tras materializarse, aquel 19 de julio del 2012, la firma de la escritura de compraventa en una notaría de Madrid.
La sociedad Agrupación Cooperativa Láctea S.L. (Acolact), que integran Feiraco y otras nueve cooperativas gallegas, se hacía con el control de una fábrica especializada en la producción de yogures y postres que es importante para el futuro de un sector ya muy castigado. El coste global de la operación ascendió a 10,2 millones de euros, de los que 2,54 corresponden a la factoría de Saiar y a la marca.
Se ponía fin a una incertidumbre que abocaba al cierre de una empresa de referencia en la comarca y que se había iniciado a principios del 2011 cuando trascendieron, por boca de los trabajadores, los problemas económicos del grupo Nueva Rumasa, de la familia Ruiz Mateos.
Este primer aniversario no suscitó ayer reacciones en la empresa, que, a preguntas de La Voz, pospuso cualquier balance general de estos primeros doce meses hasta el próximo mes de octubre. Tampoco quiso hacer valoraciones el comité de empresa, a cuyo frente sigue estando Lola Ramos. Los ajustes internos para poner en marcha la fábrica y resolver los problemas de financiación acapararon el trabajo durante los primeros meses. La incorporación de exempleados afectados por el expediente de regulación de empleo (ERE) extintivo y el lanzamiento de nuevos productos se está demorando en el tiempo más de lo previsto inicialmente.
Clesa había nacido en 1978, aunque cinco años antes se constituyó la sociedad Lácteas del Atlántico, su germen. En 1998 pasó a manos de la italiana Parmalat y en el 2007 fue Nueva Rumasa quien compró la factoría. El consejo de administración de Clesa está hoy presidido por José Ángel Blanco, de la cooperativa Os Irmandiños, y es el comité de dirección de Feiraco quien se ocupa de la gestión de la planta junto a su gerente, Pablo Gómez.
Los nuevos dueños de Clesa representan más del 20 % de la leche que se produce en Galicia, más de 400 millones de litros. Olvidar el pasado y mirar hacia el mercado y los consumidores es su receta. La prioridad en estos primeros meses pasaba por relanzar la marca y conseguir distribución. El objetivo, que la factoría de Caldas sea capaz de producir 20.000 toneladas a finales del 2014.
La entrada de extrabajadores y el lanzamiento de nuevos productos sigue pendiente