Una casa que Wright diseñó para California se hará en Inglaterra

En vida, el arquitecto norteamericano Frank Lloyd Wright (1867-1959) logró construir más de medio centenar de sus diseños, pero otros tantos se quedaron en papel. Uno de ellos data de 1956: los planos para la casa que proyectó para el médico Arthur O?Keefe y pensada -siguiendo la filosofía orgánica que inspiró el trabajo de Wright- para una parcela costera en Santa Bárbara, California.

Ahora, casi 60 años después, la vivienda podría convertirse en realidad, solo que en otro emplazamiento: en vez de mirar al Pacífico, se levantaría al otro lado del Atlántico, al sur de la ciudad inglesa de Bristol. Un ingeniero, Hugh Pratt, dispone de una parcela con un estanque donde ubicar la casa y, más importante, la autorización de la fundación que vela por el legado de Wright; con tanto celo que llegó a judicializar el intento de un admirador de construirse en Nueva York un inmueble en homenaje al maestro arquitecto. Un arquitecto de la institución, Stephen Nemtin, visitó la localización inglesa para formalizar el beneplácito de la fundación y comenzó a adaptar los planos originales para el nuevo emplazamiento.

Nemtin, que trabajó durante 50 años en Taliesin, el estudio fundado por Wright, falleció este verano, y su trabajo fue continuado por el arquitecto inglés Stephen Brooks, encargado de que la nueva construcción cumpla con la normativa actual, además de sustentar la vivienda sobre una estructura metálica, según The Guardian.

Pendiente de licencia

El proyecto está precisamente pendiente de obtener una licencia municipal para materializarse. La prensa local ya ha publicado opiniones de varios vecinos que no ven con buenos ojos la iniciativa, ya que creen que su estética no encaja con el entorno. Consciente o inconscientemente, están invocando uno de los principios mayores de la arquitectura de Wright, aquel que enuncia que un edificio tiene que adaptarse tanto a su terreno que debe parecer que surge de él. Quizá tampoco les hagan gracia los planes de Pratt, que quiere organizar visitas guiadas a la casa una vez construida y hasta ha planeado abrir una ruta de minibús para turistas.

Dejando a un lado el hecho de que construir una casa diseñada por Wright en un lugar totalmente ajeno al contexto original contraviene los postulados del arquitecto, la actualización del proyecto también plantea dudas. «Una casa de Wright hoy en día sería totalmente inviable según la normativa actual de habitabilidad», explica el arquitecto gallego Pedro Taboada, quien pone como ejemplo las viviendas de Gaudí: «Son geniales, pero ninguna podría haberse hecho hoy tal y como se diseñaron». A esto hay que añadir que el trabajo original de 1956 para O?Keefe nunca pasó de la fase preliminar, por lo que no se disponen de planos de ejecución detallados por Wright. «Con la actualización de ese proyecto lo que se hace es precisamente devaluarlo», contesta Taboada, «porque lo que da el valor a una casa de Wright es lo que se va a perder en ese proceso. El resultado no será ni una vivienda de Wright, ni de otro arquitecto. Será un Frankenstein».