Nico Baumgartner, el gallego que triunfa en el musical de Tina Turner
Fugas
Hijo de madre gallega, este artista regresó de Nueva York con la pandemia y ahora es parte del espectáculo que arrasa en Madrid. «Tina Turner convirtió el veneno en medicina», apunta
12 Nov 2021. Actualizado a las 05:00 h.
Han tenido que «contar con los dedos los 571 días» que estuvieron sin poder actuar. El sector de la cultura ha sido uno de los más castigados por la crisis sanitaria y muchos artistas han tenido que adaptarse a otras profesiones durante este año y medio con el telón bajado. Pese a todo, los hay que han sacado la parte positiva y han aprovechado el parón para reorientar su vida. Es el caso de Nico Baumgartner, un actor con amplia trayectoria en los musicales de Nueva York y Madrid al que la pandemia le dio ese empujón que necesitaba para regresar a España y poder formar parte del elenco de Tina, el nuevo espectáculo sobre la vida de la cantante Tina Turner. «El 2020 era mi último año del visado que tenía. Lo podía renovar, pero el proceso es muy complejo, caro y largo. Yo necesitaba tomar la decisión de si quería pasarlo otra vez. Entonces era el tiempo que me daba para calibrar cómo iba mi carrera, y si realmente iba a seguir avanzando ahí. A mí ya me rondaba la idea de volver, porque tengo una sobrina ahora y mi madre está más mayor. También me apetecía volver a trabajar en España», confiesa Nico. Lo que ocurrió es que vino la pandemia y lo decidió por él. «Volví sobre el 1 de junio y pensé que en septiembre u octubre podría volver a América. En algún momento de ese verano me di cuenta de que eso no iba a ser posible y de que ya había vuelto sin saberlo», afirma.
Su primera pasión fue la danza
Antes de ser elegido en el cásting de Tina para hacer de John Carpenter, Nico logró grabar un anuncio para Amazon en Budapest y trabajar en un hotel de cinco estrellas en Grecia como cantante. «No puedo decir que la pandemia me haya ido mal, casi lo contrario. Es decir, me ha empujado a hacer cosas que no tenía planeadas, me ha dado tiempo para explorarme artísticamente y estoy muy agradecido, porque he vuelto a Madrid y ha sido casi llegar y besar el santo».
A sus 41 años, este artista con raíces gallegas —su madre es natural de Santiago de Compostela y llegaron a vivir unos cuantos años en Oleiros cuando era pequeño— revela que de joven su pasión era distinta: «Quería ser bailarín y a partir de ahí descubrí el teatro musical. De hecho, recuerdo ir a Londres con mi madre y ella decirme de ir a ver un musical y yo responder: «No, no, no sé qué es y no quiero ir». Nació a partir de la danza y luego descubrí que la gente bailaba en musicales. Cuando ahora digo que soy actor es porque me considero más actor que bailarín, que cantante, aunque yo haga todas esas cosas porque es parte de mi disciplina».
Una historia de superación real que inspira a mucha gente
Tras participar en obras como Mamma mia, Guys and dolls, y Children of salt, entre otras, ahora afronta el reto de mostrar una historia de superación real. «La historia de Tina Turner inspira a muchas otras personas. La gente que lo ve piensa "es una persona que lo ha pasado tan mal, que lo ha tenido tan difícil, que ha tenido el mundo en su contra, y que aún así ha sido capaz de conseguir sus sueños", independientemente de que sea una superestrella de la música. Si ella puede, pues yo también puedo. En el momento en el que estamos ahora, en el que hemos tenido el mundo en nuestra contra literalmente, pues es, como dice ella, "convertir el veneno en medicina". Por muy mal que estén las cosas, intentar darles la vuelta y jugarlo a mi favor», resalta Nico.
Toda una experiencia que han comenzado a descubrir los asistentes al teatro Coliseum desde el pasado 1 de octubre. «Se me ponen un poco los pelos de punta porque es algo que echaba de menos. Una función no está completa hasta que tienes al público delante. Puedes estar ensayando y contando una historia, pero lo estás haciendo a una pared. Cuando tienes de golpe a mil personas delante dices: "Ah vale, esto es lo que a la gente le mueve". Para mí el estreno ha sido de pelos de punta y es estar en casa. Llevo casi 15 años haciendo teatro y para mí es casa, no hay más».