El gran día de los fans gallegos del k-pop

Hoy sale a la venta Proof, el nuevo disco de BTS. Al público más adulto algo así no le dirá muchas cosas. En las franjas más jóvenes, sin embargo, se espera como un acontecimiento. Se trata del buque insignia del k-pop, un estilo que vuelve locos a cientos de miles de chicos en todo el mundo abducidos por el color de esta particular manera de entender la música que se da en Corea del Sur. «Es un estilo muy característico que funciona al margen de todo y que tiene muchísimos seguidores», señala Mar López, integrante de la asociación Kimchimochi, dedicada a difundir y divulgar la cultura k-pop en Galicia. Mañana en el exterior de la tienda Fnac A Coruña de la plaza de Lugo celebrarán a las 12.00 de la mañana el día del k-pop en la calle. En Vigo se repetirá el encuentro con la misma tienda del centro comercial Vialia el día 18.

«Vamos a hacer una exhibición de baile, porque en el k-pop casi todas las canciones tienen una coreografía asociada, es algo que no se puede separar», explica Mar. En grupo y de manera individual, los fans mostrarán su destreza de baile. Al terminar habrá una sesión de Random Play Dance. «Es básicamente poner a sonar estribillos de canciones de k-pop de manera aleatoria y la gente sale a bailar. Es bastante impresionante verlo», adelanta.

¿Pero qué tiene el k-pop para que un montón de jóvenes en Galicia lo sigan de este modo tan intenso? «Es música muy comercial en la que la imagen, en general, tiene una importancia muy grande —explica Mar—. No solo en los Idols [así es como se denominan a los artistas], sino toda la estética, desde los videoclips a los álbumes». En ese sentido, el k-pop se presenta como un raro fenómeno donde las ventas en formato físico son espectaculares. Lo corrobora Rubén Liñares, responsable de comunicación de Fnac A Coruña y Vigo: «Se venden muchísimos, tanto álbumes como singles, con ediciones muy cuidadas que incluyen postales, adhesivos, libretos, chapas... Muchas veces tenemos que traer copias de importación porque no nos llegan con las que se editan aquí». ¿Por qué? «El packaging es muy trabajado y genera mucho coleccionismo sobre ellos. En algunos casos te trae un álbum de 100 hojas dentro o tarjetas coleccionables con modelos distintos», añade Mar.

El k-pop es una rueda que no deja de girar nunca, alimentando los deseos de todos estos fans: «Se está generando contenido constantemente. Hay como cuatro shows de música a la semana en Corea. Por tanto cuando sale una canción tienes un mínimo de cuatro actuaciones en televisión que puedes ir siguiendo. Es muy fácil que ellos puedan mostrar su personalidad y generar empatía con el público».

El gran icono

«BTS son el grupo número uno a nivel mundial. Fueron de los primeros que apostaron por las redes sociales, por comunicarse a través de Twitter y hacer muchos directos para interactuar con los fans», señala Mar López que también alude al alto grado de conexión emocional lograda con sus seguidores: «Ellos apostaron por el material propio y sus canciones hablan sobre los problemas de la juventud, la depresión y la salud mental. De este modo, empatizaron muchísimo con su público». Seguramente, las copias de Proof vuelen en cuanto se pongan en los estantes. Es la fiebre del k-pop, que no remite. Al contrario, sube y sube.