El Dubra ya es de Tercera División

El Dubra jugará la próxima temporada en Tercera División. Lo que no hace muchos años parecía un objetivo imposible, en la tarde de ayer se convirtió en realidad. El equipo amarillo igualó en Dumbría y sumó el punto que necesitaba para cambiar de categoría.

La junta directiva del Dubra decidió dar un paso más cuando empezó a programar la actual campaña. Por eso, era fundamental la continuidad de Jesús Baleato al frente del banquillo. Su hijo, Jorge Baleato, director deportivo del club, tenía la misión de convencer al técnico tras la orden que llegó del despacho presidencial. El técnico aceptó el reto y se puso en marcha la maquinaria para intentar colocar al conjunto amarillo en la categoría inmediatamente superior.

Con humildad, sin asumir nunca el papel de favoritos, con mucho trabajo y una excelente plantilla, el Dubra comenzó el campeonato con el objetivo de mejorar sus actuaciones anteriores en la Preferente Galicia.

Poco a poco, el Dubra se situó en la zona noble de la tabla clasificatoria, aunque con muchos problemas en su retaguardia. El equipo tardó en regularizar sus actuaciones. Tras recuperar su solvencia defensiva, los de Bembibre empezaron a dar su mejor versión y encontraron el gol con relativa facilidad. Así, el once amarillo se posicionó como uno de los grandes aspirantes.

Acabó la primera vuelta en la segunda posición, por detrás de uno de los favoritos, el Atlético Arteixo. Todavía no había aparecido en escena el campeón Castro, que firmó una extraordinaria segunda vuelta. La gran regularidad en los momentos más delicados e importantes del torneo auparon a los amarillos a lo más alto de la general.

En las últimas nueve jornadas el Dubra no perdió. Sumó seis victorias y tres empates, logrando medio ascenso en el campo del Bertamiráns. En la jornada final, el Dubra no falló, aunque no respiró tranquilo hasta que el árbitro decretó el final del choque. En el campo del Dumbría, el once de Jesús Baleato se puso con ventaja en el marcador (0-2), pero en la segunda parte los locales igualaron (2-2) y le metieron el miedo en el cuerpo a los de Bembibre. Al final, al Dubra le bastaba con el empate para subir y el punto logrado en el feudo del Dumbría fue histórico.

Y al final, miles de sentimientos en la celebración de una afición volcada con el fútbol. Muchos recuerdos para homenajear a hombres que lo dieron todo por este club, como los hermanos Juan Baleato y José Baleato, Palillos, dos héroes que nadie olvida en Bembibre. «Esto era impensable cuando hace tres años llegué al equipo para evitar el descenso», cuenta el entrenador Jesús Baleato. Explica que es «el no va más» y que el éxito desborda a técnicos, jugadores y afición.